Saltar la cuerda, el ejercicio fácil y rápido que mejora la productividad de los colaboradores
Saltar la cuerda es un ejercicio que incrementa la productividad de los colaboradores ya que reduce sus niveles de estrés y el grado de ausentismo.
Saltar la cuerda es un ejercicio cardiovascular intenso que quema una cantidad significativa de calorías en un corto período de tiempo. Esto lo convierte en una excelente opción para quienes desean perder peso o mantenerse en forma.
Este ejercicio es bueno para los colaboradores ya que eleva la frecuencia cardíaca y aumentar la circulación sanguínea, saltar la cuerda fortalece el sistema cardiovascular. Esto puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y mejorar la salud del corazón.
Este último es una de las razones por las que hacer este ejercicio ayuda a los colaboradores. De acuerdo con el organismo, Centers for Disease Control and Prevention (CDC), hay 10 factores relacionados con el trabajo que causan hasta el 8 por ciento de los costos de atención médica. El más importante de ellos son las jornadas laborales largas.
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Saltar la cuerda, un ejercicio con el que los colaboradores mejoran su calidad de vida
La Universidad de Harvard explica que por media de ejercicio, una persona que pesa en promedio 70 kg de forma rápida quema cerca de 421 calorías. Pero si lo hace de forma lenta elimina aproximadamente 281 calorías.
Esto es una cantidad significativa de gasto energético tomando en cuenta que el mismo estudio demuestra que correr por la misma cantidad de tiempo equivale a quemar 316 calorías.
1. Aumento de productividad
La actividad física regular, como saltar la cuerda, puede aumentar la energía y la vitalidad de los colaboradores. Esto puede traducirse en una mayor productividad en el trabajo, ya que los empleados se sentirán más alerta y concentrados.
Un estudio demostró que el ejercicio durante la jornada laboral no solo mejora el bienestar, sino que los participantes notaron una mejora del 72 por ciento en la gestión del tiempo.
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2. Reducción de estrés
El ejercicio, incluido el salto de cuerda, es conocido por reducir el estrés y aumentar la liberación de endorfinas, que son neurotransmisores que promueven la sensación de bienestar. Menos estrés en el lugar de trabajo puede resultar en un ambiente laboral más positivo y saludable.
Según Mayo Clinic la actividad física aumenta la producción de los neurotransmisores del cerebro que nos hacen sentir bien, denominados endorfinas. Aunque esta función con frecuencia se describe como la satisfacción al hacer cualquier actividad aeróbica, puede generar la misma sensación.
3. Mejora la concentración
La actividad física regular puede aumentar la circulación sanguínea al cerebro, lo que puede mejorar la concentración, la creatividad y la toma de decisiones. Los colaboradores pueden experimentar una mayor claridad mental y una mejor capacidad para resolver problemas.
El University College of London explica que cuando se realiza una actividad física intensa, la sangre fluye hacia el cerebro. Esto, a su vez, activa las neuronas y promueve el crecimiento celular, particularmente en el hipocampo. Esto significa que sólo 20 minutos de ejercicio antes de estudiar pueden mejorar tu concentración y ayudarte a centrar tu aprendizaje.
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4. Reducción de ausentismo
La promoción de la actividad física en el lugar de trabajo puede contribuir a una reducción del ausentismo, ya que los colaboradores pueden experimentar menos enfermedades relacionadas con el estilo de vida.
Según información retomada de un artículo publicado en The National Library of Medicine, el ausentismo laboral relacionado con enfermedades es una gran amenaza para la productividad laboral, con una pérdida estimada de 250 mil millones de dólares anualmente en los Estados Unidos.