El micromanagement en la organización

José Ochoa 06 Jul 2023

mira el video de la nota

La presencia del micromanagement no es exclusivo de algún nivel jerárquico en particular y contribuye al fracaso de los negocios.

El “micromanagement” suele ser un asesino silencioso dentro de las organizaciones. Algunas veces imperceptible y muchas veces se logra confundir con la atención a los detalles o incluso con el tan preciado “Hard work” (trabajo duro).

A las personas que se centran en aplicar este tipo de “técnica” o comportamiento laboral se les suele llamar micromanagers.

Estos micromanagers suelen poner toda su atención en controlar detalles y actividades sin importancia, ignorando lo que verdaderamente es relevante para que la organización logre sus objetivos y resultados.

Los 7 pecados capitales del liderazgo: Tentaciones que debes evitar en el mundo del management

Esta falta de perspectiva y de visión estratégica se encuentra con más frecuencia de la que se piensa.

La presencia del micromanagement no es exclusivo de algún nivel jerárquico en particular, de hecho muchas de las personas que suelen aplicar esta retrógrada técnica muchas veces se encuentran en puestos altos o claves dentro de las organizaciones, lo cual es un factor, sin duda, sólido del alto nivel de fracasos en el mundo de los negocios.

Lo peor de la situación se da cuando “micromanagers” tienen a su cargo equipos de personas dentro de la organización ya que evidentemente son incapaces de gestionarlos.

Rasgos del micromanagement

Los rasgos mas comunes que caracterizan a un “micromanager” son:

Nunca están satisfechos con los resultados de otras personas si la actividad no se llevó a cabo EXACTAMENTE como ellos lo habían pedido.

Quieren saber en TODO MOMENTO dónde se encuentran los miembros de sus equipos, qué tareas están realizando y siempre piden reportes extensos y detallados de cada actividad requerida a los miembros de sus equipos.

Es MANDATORIO que se les incluya en copia de cada correo electrónico que involucre las actividades de cada proyecto, lo cual es un síntoma de su obsesión desmedida de control.

7 películas de maestros que puedes disfrutar en Netflix

Estos rasgos sin duda OBSTACULIZAN en sobremedida la productividad de el equipo además de la suya propia.

No mal entendamos el tema y dejemos de lado, que por supuesto es necesario, que todo líder de la organización o jefe de departamento necesita estar al tanto de las actividades y de revisar cómo van los avances y las cosas propias del funcionamiento adecuado de los equipos y de la organización.

Un claro ejemplo de esto es el tipo de liderazgo y “management” al que incitan a sus miembros empresas de primer nivel como Zappos y Netflix.

Recientemente Reed Hastings, cofundador de Netflix (actualmente la compañía con más relevancia en el mundo del streaming y el entretenimiento a nivel mundial), publicó el libro “No Rules Rules” (La regla de las no reglas).

En el libro se explica cómo uno de los factores MÁS importantes para el desempeño de la organización y para lograr la constante innovación es, sin duda, el empoderamiento de TODOS sus empleados a que tomen las decisiones necesarias dentro de sus roles en la empresa ya sean pequeñas o grandes.

Así como también el que pueden trabajar desde el lugar que les plazca y las horas que crean ellos que son las necesarias para lograr sus objetivos personales y por supuesto los de la empresa.

Este tipo de filosofía, flexibilidad y liderazgo radical y contraintuitivo ha llevado a Netflix a ser una de las empresas más disruptivas, innovadoras y rentables de este siglo.

¡Adiós a las cuentas compartidas! Esto te cobrará Netflix por miembros extra

Siempre recomiendo valorar más a las personas que a los procesos lo cual enfatiza sin duda la innovación sobre la eficiencia, esto le brinda a los empleados un contexto y no un control.

Esta libertad de decisión es la semilla que hace el diferenciador sobre una empresa de primer nivel versus otra de el siglo pasado.

¿Qué organización quieres construir? Sin duda yo sé la respuesta…. y tú, ya también sabes la fórmula.

¡Súbete al ring!