Jim Morrison, lecciones de un lagarto para ser un rockstar de los negocios
Jim Morrison es una de los mayores líderes rebeldes que ha tenido la cultura pop, si quieres dirigir tu empresa como él, sigue estos 5 consejos.
La escena musical de los años 60 no pudo haber sido la misma sin la existencia de Jim Morrison, el líder de la banda The Doors que, a través de su música psicodélica revolucionaron a su industria.
Con pantalones de cuero, camisas desabrochadas, lentes de estilo aviador, cabello esponjado y actitud despreocupada, el Rey Lagarto, supo influenciar a su público y a sus distintos colegas. Él marcó nuevas normas en el escenario y cientos de personas lo comenzaron a seguir.
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Además, Jim Morrison era un talentoso poeta y letrista. Sus letras líricas y poesía eran provocativas y exploraban temas como el amor, la muerte, la espiritualidad y la libertad. Su forma de expresión artística resonó profundamente en una generación que buscaba nuevas formas de pensar.
Claves para ser un líder como Jim Morrison
Durante la década en la que los escenarios le dieron la bienvenida a Jim Morrison, Estados Unidos vivía un panorama social y político complicado. La guerra que sostenía Estados Unidos en suelo vietnamita había desencadenado un movimiento contracultural en donde los adolescentes estadounidenses sólo pedían el cese al uso de armas.
En aquel contexto, durante el que los políticos perdieron su figura de liderazgo, los jóvenes comenzaron a seguir a figuras como la del Rey Lagarto y aún hoy en día lo siguen haciendo.
Aunque su vida estuvo marcada por su carácter controvertido y su muerte prematura a los 27 años, aún podemos extraer algunas lecciones de liderazgo de su experiencia artística y personal.
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1. Se mostró auténtico
Jim Morrison fue conocido por su autenticidad y su habilidad para expresarse libremente. Como líder, es esencial mostrar tu verdadero yo. Esto implica ser honesto contigo mismo y con los demás, y tener la valentía de ser fiel a tus principios y creencias.
Al mostrarse de esa forma, los dirigentes generan un ambiente de confianza en el que las personas se sienten seguras para expresarse, compartir ideas y asumir riesgos. También son percibidos como líderes que motivan porque muestran una pasión genuina por lo que hacen y transmiten sus valores y creencias.
“Durante un compromiso hay libertad y al mismo tiempo obligación de jugar bien. Puedo trabajar un día completo, ir a casa y darme una ducha, cambiarme de ropa, luego jugar dos o tres juegos en el Whisky, hombre, y me encanta”, comentó en una entrevista para Rolling Stone Magazine.
2. Encarnó las necesidades de la sociedad
El Rey Lagarto fue un ícono del movimiento contracultural de los años 60: Durante la década de 1960, Estados Unidos experimentó un período de agitación social y cultural. Morrison encarnaba el espíritu de rebelión y libertad de esa época.
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Su actitud desafiante, su estilo de vida bohemio y sus letras subversivas lo convirtieron en un símbolo del movimiento contracultural. Muchos lo veían como un líder antiautoritario y una figura que desafiaba las convenciones establecidas.
“There’s blood in the streets, it’s up to my ankles (she came)
Canción “Peache Fog”, The Doors.
Blood in the streets, it’s up to my knee (she came)
Blood in the streets, the town of Chicago (she came)
Blood on the rise, it’s following me
Think about the break of day”
3. Fomentó la comunicación transparente
Jim Morrison era un consumado poeta y letrista. Sus palabras tenían un impacto profundo en su audiencia. Como líder, es importante desarrollar habilidades de comunicación efectiva y transparente para transmitir tus ideas de manera clara. Aprender a utilizar el poder de las palabras puede ayudarte a influir en los demás y construir relaciones sólidas.
Los líderes con este tipo de comunicación son más propensos a compartir información de manera abierta y honesta, lo que ayuda a los miembros del equipo a comprender mejor la visión, los objetivos y los desafíos de la organización. La transparencia también permite abordar problemas de manera más efectiva y tomar decisiones informadas.
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4. Se comprometió con su arte
El cantante fue conocido por su intensidad y pasión en el escenario. Sus presentaciones fueron conocidas por ser legendarias ya que él siempre expresaba a través de su voz y cuerpo lo que quería decir con cada una de sus composiciones.
Como líder, debes ser apasionado y comprometido con tu visión y metas. Esta pasión y compromiso contagiarán a tu equipo y los motivarán a alcanzar un rendimiento excepcional.
“Me gustan hacer piezas musicales que sean la pura expresión de la alegría, tan puras como la luz del sol y la existencia misma”, comentó en una entrevista.
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5. No tuvo miedo de desafiar las normas
Jim Morrison desafiaba las normas sociales y artísticas de su época. Como líder, a veces es necesario cuestionar el status quo y desafiar las convenciones establecidas para buscar nuevas soluciones y oportunidades. No tengas miedo de romper barreras y explorar lo desconocido.
Cualquier director de una empresa debe de desafiar las normas con el propósito de desafiar las normas establecidas puede abrir la puerta a la innovación y la creatividad. Al desafiar esas normas, un líder puede fomentar un ambiente en el que se anime a los miembros del equipo a pensar de manera diferente.