5 mejoras clave para impulsar el rendimiento de tu fuerza laboral

¿Cómo pueden los líderes darles más potencia a sus equipos? Aplica estas prácticas recomendadas para abordar los desafíos que abarcan desde la toma de decisiones basada en datos hasta la comunicación.
Al igual que los diseñadores de autos de carrera de Fórmula Uno, las empresas deben aprender de las innovaciones más recientes y ayudarles a sus líderes a aplicarlas en su fuerza laboral.
Hemos seleccionado cinco consejos para los gerentes que quieren revitalizar sus organizaciones.
Estos conocimientos se centran en cómo inspirar a los colaboradores para que den lo mejor de sí y ayudar a las personas a afrontar los desafíos relacionados con la Inteligencia Artificial, la disrupción y el burnout.
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5 mejoras que tu empresa necesita
Esta no es una lista definitiva, pero creemos que encontrarás al menos una estrategia que puede ayudarte a enfrentar los desafíos de liderazgo y encontrar nuevas rutas hacia el éxito.
1. Descubre por qué los empleados ignoran los buenos datos
A veces, las empresas generan datos sólidos que se supone que ayudan a la fuerza laboral a hacer mejor su trabajo, pero luego los colaboradores se niegan a usarlos.
Tal vez no sea confiable la información o sus recomendaciones sean contrarias a la intuición y dirijan a los empleados hacia una dirección cuando sus instintos les indican que deben ir hacia otra.
Esto no es inusual. El cementerio de iniciativas de ciencia de datos está lleno de soluciones avanzadas, precisas y bien intencionadas, pero que no se utilizan.
Para crear una cultura que realmente pueda basarse en datos, los líderes pueden hacer tres cosas.
En primer lugar, pueden identificar el verdadero problema (el verdadero desafío urgente de un equipo) e identificar a alguien que lidere una iniciativa para determinar cómo solucionarlo e influir en la participación de los usuarios.
En segundo lugar, los líderes pueden impulsar la adopción con la narración ejecutiva y la gamificación.
Y en tercer lugar, pueden identificar métricas de éxito de manera temprana y trabajar para unir a los equipos en torno a ellas.
2. Anima a los colaboradores a experimentar con la reestructuración de sus funciones laborales
Cuando la fuerza laboral “diseña” sus responsabilidades diarias, los lugares de trabajo experimentan un mayor compromiso y una mejor dinámica de equipo.
Esta idea va más allá del diseño de puestos de trabajo convencional, ya que ofrece a las personas la oportunidad de adaptar sus funciones, tareas e interacciones para que se ajusten a sus fortalezas personales y, a su vez, reduzcan la probabilidad de agotamiento.
Hay tres elementos: la elaboración de tareas, donde se les dan a los empleados oportunidades de asumir responsabilidades adicionales, alterar la forma en que se realizan las tareas actuales o abandonar las que no se adaptan a sus fortalezas o intereses.
La elaboración relacional , donde los empleados mejoran su eficacia laboral al aumentar la colaboración con colegas específicos.
Y la elaboración cognitiva , donde los empleados se centran en los aspectos de sus trabajos que mejor se alinean con sus pasiones.
No se trata de una mera iniciativa. En sectores dinámicos como el tecnológico, donde el cambio rápido es la norma, los empleados que están acostumbrados a reestructurar sus funciones laborales pueden adaptarse a las demandas del mercado con mayor rapidez.
3. Pregunta a tu fuerza laboral qué habilidades desea dominar y ayúdala a lograrlo
El dominio es la capacidad de crear un conjunto profundo de conocimientos y su base se basa en microhabilidades: aquellas competencias que cada uno de nosotros desarrolla a lo largo de la vida laboral. Juntas, forman una capacidad que es valiosa y única.
Las habilidades se adquieren mediante la observación, la repetición y la retroalimentación.
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4. Haz que los empleados vuelvan a divertirse en el trabajo
En el juego tradicional, el objetivo no es ganar ni perder, ni alcanzar un objetivo, sino divertirse.
Contrasta las intenciones detrás de la actuación, la práctica y el juego. Cuando estás actuando, estás tratando de lograr la excelencia frente a un estándar determinado. Tu objetivo es hacerlo lo mejor posible.
Cuando estás practicando, estás tratando de mejorar tus habilidades para poder cumplir con un estándar determinado en el futuro. Tu objetivo es mejorar.
Pero cuando estás jugando, no hay juez ni entrenador. Puedes participar en la experimentación de bajo riesgo, el desarrollo de capacidades y la innovación. Puede ser incómodo, pero también puede ser el escenario en el que más aprendemos.
En las primeras etapas de la gestión de cambios disruptivos, como por ejemplo, cuando se trata de descubrir cómo incorporar la Inteligencia Artificial en una organización, es fundamental permitir que la fuerza laboral juegue con herramientas como la IA generativa. Es el juego el que conduce al aprendizaje.
5. Habla sobre cualquier tema, aunque sea incómodo en la organización
Respira profundamente, porque esta es una dura verdad sobre el liderazgo: la mayoría de las personas sabe que hay ciertas cosas que no se pueden decir en su empresa.
“No me siento motivado para trabajar más duro cuando los jefes se llevan la mayor parte del crédito y todo el dinero de las bonificaciones”.
“El compromiso de los empleados es bajo porque no se respeta a los líderes clave”.
“No puedo tomar buenas decisiones a menos que se vuelva más transparente con los detalles financieros”.
Este tipo de comentarios que suele hacer la fuerza laboral violan las reglas profundas que operan en la mayoría de las organizaciones: el entendimiento no escrito de lo que no se puede decir, incluso en lugares que tienen una seguridad psicológica superficial.
Sin embargo, existen herramientas para romper con las reglas no escritas que hacen que las personas se autocensuren.
Los líderes pueden convocar a un grupo de personas dentro de la organización con las que tienen una relación establecida, o pueden desarrollar una encuesta anónima.
Otra dura verdad: una vez que los líderes hacen estas preguntas, necesitan hacer algo significativo como respuesta.

Un consejo extra…
Te dejamos un consejo extra: ten cuidado con el peso que llevas sobre tus propios hombros.
Es decir, mientras trabajas para empoderar a tu fuerza laboral y hacer que tu organización sea más fuerte en general, no ignores tu propia luz y pases por alto tus necesidades.
Comprenderlo puede ayudarte a pasar de sentir que apenas estás manteniendo el orden a volver a donde quieres estar: liderando a los empleados en un viaje inspirador.
ACERCA DE LA AUTORA
Leslie Brokaw es editora colaboradora de MIT Sloan Management Review USA.

