María Mercedes Baltazar Lobato, directora de Meraki México, ofrece estrategias clave para que las pymes enfrenten la complejidad geopolítica global.
En un mundo cada vez más complejo, entender el impacto de la geopolítica en los negocios se ha vuelto esencial, incluso para las pymes.
Durante la conferencia “Navegar la incertidumbre de la geopolítica global: Una guía para pymes”, María Mercedes Baltazar Lobato, fundadora y directora de Meraki México, ofreció una perspectiva sobre cómo las pymes pueden adaptarse y prosperar en este contexto desafiante.
“La pregunta del millón es: ¿si soy una pyme, me debería importar lo que pasa en el mundo? La respuesta es sí”, afirmó.
Aunque muchas pymes operan localmente están inevitablemente conectadas con el entorno global, ya sea a través de cadenas de suministro, fluctuaciones del tipo de cambio o incluso cambios en la normativa laboral internacional.
“Es un momento de alta incertidumbre, lo que requiere que nuestras empresas sean más dinámicas, porque el cambio es la única constante”, dijo Baltazar destacando la necesidad de que las pequeñas y medianas unidades económicas desarrollen flexibilidad y capacidad de adaptación.
La directora de Meraki México insistió en la importancia de utilizar herramientas de análisis para que las pymes puedan detectar riesgos y oportunidades.
“Lo que debemos hacer es monitorear y estar atentos. El cambio siempre manda señales, y lo que podemos hacer es crear un sistema para monitorearlas”, sugirió en el Foro MIT SMR México 2024.
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Si bien este entorno incierto puede parecer desalentador para las pymes, Mercedes Baltazar transmitió un mensaje contundente.
“Más que preocuparnos, debemos ocuparnos. Tenemos que estar atentos y anticipar el cambio porque, aunque nuestro objetivo no sea globalizarnos, el mundo nos afecta y nosotros afectamos al mundo”.
La experta instó a los emprendedores a adoptar una postura proactiva y estratégica frente a la incertidumbre global.
De igual forma brindó un enfoque fresco y humanista para las empresas que buscan navegar en tiempos turbulentos.
En ese sentido, les recordó que, aunque el entorno sea incierto, con las herramientas adecuadas es posible anticipar y aprovechar las oportunidades que el cambio trae consigo.
“El cambio siempre manda señales y es responsabilidad de cada empresa aprender a leerlas y actuar en consecuencia para mantenerse competitiva en un mundo cada vez más globalizado y complejo”.