De acuerdo con algunas autoridades, el Fondo de Pensiones para el Bienestar busca que todos los mexicanos reciban una pensión digna al momento de jubilarse. Sin embargo, esta reforma aún presenta huecos que preocupan a diversas instituciones y a los mexicanos.
La Cámara de Diputados aprobó la reforma sobre el Fondo de Pensiones para el Bienestar. Esta permitirá que los ahorros de trabajadores mayores de 70 años de edad no reclamados en las Administradoras de Fondo para el Retiro (Afores) se utilicen para complementar pensiones de trabajadores que reciban menos de 17 mil pesos.
El siguiente paso es que la creación del fondo y sus posibles consecuencias para las Afores sean discutidas en el Senado.
De acuerdo con la Secretaría de Gobernación (Segob), la iniciativa tiene la finalidad de garantizar que las y los trabajadores que ganan hasta el salario promedio y cotizan en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), se jubilen con el 100 por ciento de su sueldo mediante un complemento solidario.
Luisa María Alcalde, secretaria de Gobernación, señaló que se trata de la segunda reforma para mejorar la condición de retiro de los colaboradores en México.
“La reforma de 1995 cambió del sistema solidario a cuentas administradas por las Afores. Se incrementaron las semanas de cotización de 10 años a 25 años y la pensión ya no era en función del salario, era en función del ahorro. Un trabajador que ganaba 10 mil pesos se jubilaba con 2 mil 700 pesos”.
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El IMSS explica lo necesaria que es esta reforma ya que conforma un pilar para fortalecer y consolidar el sistema de seguridad social en México.
Según el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), el sistema de pensiones actual tiene tres fallas importantes:
“El gasto público que se asigna para cubrir las pensiones es inequitativo significativamente, entre instituciones, tipos de pensión y generaciones”.
Para ejemplificar la desigualdad que sufren de los mexicanos, la institución expuso que las generaciones pensionadas por el Régimen de beneficio pueden recibir, al menos, 40 por ciento de su último salario. En cambio, los de cuentas individuales solo alcanzan el 30 por ciento.
El proyecto de ley establece que el objetivo de la reforma será garantizar que toda la ciudadanía tenga acceso a una pensión digna.
1. De acuerdo con la iniciativa, el 75 por ciento del financiamiento del fondo de pensiones provendrá de los recursos derivados de las incautaciones de:
2. El 25 por ciento será de las utilidades netas obtenidas de las entidades paraestatales sectorizadas en las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y de Marina (Semar)
3. La reforma protege las cuentas individuales de las Afores no reclamadas. Además, pone a salvo los ahorros de las y los trabajadores que están en activo
4. Además, de dar rendimientos a las y los trabajadores, no se les cobrarán comisiones por manejar los recursos, como hoy lo hacen las Afores
5. Las cuentas de las y los trabajadores estarán totalmente seguras. Estas serán administradas por un comité técnico financiero, donde participarán las autoridades financieras así como el IMSS, Issste e Infonavit.
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Alejandro Moreno Cárdenas, diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), comentó que esta iniciativa es un robo a las y los trabajadores mexicanos.
“Es un robo a las y los trabajadores que no lo vamos a permitir. Agotaremos todas las instancias legales y jurídicas que nos permitan combatirlo, porque no solo es un robo, es un gran despropósito”.
Al igual que el servidor público, algunas instituciones aportan una visión contraria respecto a la creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar. Uno de ellos es el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) que expuso los siguientes puntos:
1. El monto del apoyo gubernamental no se especifica en la iniciativa, ya que estará sujeto a las reglas que determine eventualmente la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP)
2. Únicamente beneficiará a los empleados del sector privado que comenzaron a cotizar en el IMSS a partir de julio de 1997. También los funcionarios públicos que cotizan en el ISSSTE desde abril de 2007 se verán favorecidos
3. Los colaboradores que podrían recibir el apoyo son aquellos que cumplan con los siguientes tres requisitos:
4. La iniciativa no establece el monto del apoyo que recibirán los trabajadores, ni garantiza que lo obtengan
5. La transferencia de recursos desde las Afores y el Infonavit hacia el Fondo de Pensiones para el Bienestar está condicionada a que los trabajadores alcancen las edades señaladas y no mantengan una relación laboral en ese momento