¿Te has notado más irritable de lo normal? ¿Comes bien? ¿Duermes de forma correcta? Toma nota, hazte estas preguntas para determinar tu grado de estrés, esto podría salvar tu vida y solo toma cinco minutos.
Ser presa del estrés no es algo normal. De hecho, cada colaborador que se sienta la mayor parte de su jornada laboral con esta sensación debería de reevaluar su calidad de vida.
Este malestar es peligroso, incluso la división de estudios de la salud de Cambridge advirtió que los trastornos relacionados con el estrés son diversos. Incluso, pueden tener síntomas tanto físicos como mentales. Esto debido a que varios sistemas y órganos corporales están involucrados simultáneamente.
La fisiopatología de los trastornos relacionados con el estrés involucra muchos factores. Por ejemplo, un estresor observable o percibido, una vulnerabilidad y una mala adaptación individual que evoluciona dinámicamente y que conduce al desequilibrio. Así como variables ambientales, culturales, de género y del ciclo de vida.
De acuerdo con el Instituto Americano del Estrés, diariamente casi un millón de colaboradores faltan a sus labores por un tema relacionado a este mal.
Por esto, es necesario desarrollar un instrumento de evaluación del estrés cuantificable y completo. Tener a la mano este tipo de herramienta contribuiría a la sofisticación operativa clínica. Esta, arrojaría luz sobre las opciones de tratamiento y las intervenciones multidimensionales para el bienestar.
Sin embargo, aún pocas empresas, organizaciones o centros de estudio tienen este tipo de elementos. Mientras tanto, cada uno de los colaboradores debe de averiguar su estado de bienestar ante el estrés para poder pedir unas vacaciones o relajarse un poco antes de que este elemento perjudique su salud de forma permanente.
Las exigencias laborales, las responsabilidades familiares y las presiones sociales contribuyen a un estado de tensión que, si no se maneja, puede tener consecuencias graves.
Verificar su propio grado de estrés, los colaboradores pueden mantener un equilibrio saludable y prevenir problemas de salud.
10 ejercicios de relajación que te ayudarán a disminuir el estrés y la ansiedad
A continuación, te compartimos algunas preguntas que te ayudarán a saber si tu trabajo es un factor de estrés en tu vida cotidiana.
Sentirse agotado físicamente después del trabajo puede ser un indicio de estrés laboral.
De acuerdo con Mayo Clinic, este tipo de cansancio va más allá del desgaste normal y puede afectar tu bienestar general.
El insomnio o el sueño interrumpido pueden ser señales claras de estrés. La mente hiperactiva y las preocupaciones laborales pueden impedir que disfrutes de un sueño reparador necesario para tu salud.
La National Sleep Foundation señala que el estrés es una causa común de problemas de sueño.
Los dolores de cabeza, especialmente los de tipo tensional, pueden estar relacionados con el estrés laboral.
Si notas un aumento en la frecuencia o intensidad, es importante considerar su origen emocional.
El estrés puede afectar tu capacidad de concentración y toma de decisiones. Si te resulta difícil enfocarte en tareas simples o pierdes fácilmente el hilo de tus pensamientos, puede ser una señal de alarma.
Un estudio de la Universidad de Harvard encontró que el estrés puede reducir significativamente la capacidad de concentración.
El estrés laboral puede manifestarse en cambios de humor y una mayor irritabilidad.
Si te encuentras reaccionando de manera desproporcionada a situaciones cotidianas, es posible que el estrés esté influyendo, según la Anxiety and Depression Association of America (ADAA).
El estrés puede afectar tu apetito, llevándote a comer en exceso o a perder el interés en la comida.
Cualquier cambio significativo en tus hábitos alimenticios podría estar relacionado con el estrés. La Harvard Medical School menciona que esto puede alterar los patrones alimenticios y provocar cambios en el apetito.
Sentirse constantemente presionado por las demandas laborales es una clara señal de que padeces esta condición.
Mayo Clinic destaca que la presión constante para cumplir con las tareas puede ser un síntoma de estrés laboral.
Pero esta sensación de urgencia y sobrecarga puede afectar negativamente tu salud mental y física.
Esta emoción puede tener un impacto directo en tu sistema digestivo, provocando malestares como dolores de estómago, náuseas o diarrea.
Estos síntomas pueden ser un reflejo del estado de tu salud emocional.
La desmotivación y la apatía hacia el trabajo pueden ser señales de agotamiento emocional.
Si ya no encuentras satisfacción en tus tareas, es crucial abordar la raíz del problema. La Organización Mundial de la Salud (OMS) identifica la desmotivación y la apatía como síntomas del síndrome de burnout.
El estrés laboral puede afectar tus relaciones personales, llevando a conflictos y distanciamiento.
Si notas que tus relaciones están cambiando, es momento de considerar cómo el estrés está impactando tu vida, recomienda la ADAA.