El subgobernador del Banco de México explica los retos de la inflación en México y las políticas monetarias necesarias para su control.
El cierre del Foro MIT SMR México 2024 contó con la participación de Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México (Banxico), quien ofreció una perspectiva clara y directa sobre los desafíos inflacionarios y la política monetaria en México.
Heath explicó cómo la inflación evolucionó desde el inicio de la pandemia, resaltando su impacto en las decisiones económicas tanto a nivel local como global.
De igual forma, desde su perspectiva, el fenómeno inflacionario global sorprendió a economías de todo el mundo.
“Fue una cantidad de disrupciones y problemas que surgieron a nivel global que hicieron que tuviéramos una inflación muy difícil y un brote inflacionario muy distinto a los que habíamos tenido en el pasado”, afirmó.
Este “brote inflacionario” no fue exclusivo de México, sin embargo, afectó a nuestro país de manera singular debido a la complejidad de la economía local.
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Factores que influyeron en las decisiones de Banxico
Sobre el análisis de la inflación subyacente y no subyacente, Heath explicó que los precios no subyacentes, que incluyen alimentos y energéticos, no fueron susceptibles a las acciones de política monetaria, ya que respondieron a factores externos como las condiciones climáticas y las políticas públicas.
En cambio, los precios subyacentes, aquellos relacionados con la oferta y demanda normal de bienes y servicios, fueron el principal objetivo de las acciones del Banxico.
La pandemia, según el subgobernador, desencadenó disrupciones sin precedentes en las cadenas de suministro a nivel global, lo que afectó el costo de productos esenciales, como chips y aluminio, generando un aumento en los precios de los productos finales.
A pesar de estos desafíos, las presiones inflacionarias globales comenzaron a disiparse en la segunda mitad de 2022, lo que permitió que la inflación en México tuviera una tendencia a la baja.
El economista se mostró optimista al afirmar que, en los últimos meses, la inflación retomó una tendencia a la baja.
Para finales de 2024, Heath proyectó que la inflación podría cerrar más cercana al 4 por ciento, aunque destacó que la lucha contra la inflación no estaba completamente ganada.
En cuanto a las proyecciones futuras, fue claro en sus expectativas: “Queremos que la inflación general se acerque a nuestro objetivo de mediano y largo plazo del 3 por ciento”.
En un contexto de incertidumbre global, las decisiones sobre política monetaria serán cruciales para asegurar la estabilidad y el bienestar económico del país.
“Nos queda mucho por hacer, pero estamos comprometidos a llevar la inflación a niveles más controlables para beneficio de todos los mexicanos”.
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