Muchas científicas mexicanas han hecho grandes aportaciones a pesar de no ser tan reconocidas. Ese es el caso de Itzel Lara, Ali Guarneros y Aurea Ramírez.
Las científicas mexicanas han ganado terreno en el campo internacional. Ahora, algunas de ellas trabajan para agencias internacionales, como la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) y otras han desarrollado avances tecnológicos que muchos conocen.
Sin embargo, de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), 3 de cada 10 mujeres eligen estudiar carreras carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Techo de cristal: 3 mujeres líderes que supieron cómo romperlo
Esa es la razón por la que MIT Sloan México te presenta un listado con tres de las mujeres científicas mexicanas más importantes que existen y que seguramente no conocías.
La empresa 3M, una de las desarrolladoras de tecnología más grandes del mundo, en 2021 premió a la científica Itzel Lara debido a su trabajo de investigación titulado:
En su laboratorio, Lara se encarga de recrear pequeños tumores de cáncer mamario para poder estudiarlos a través de diversas plataformas y así encontrar el tipo de medicamentos que podrían acabar con esas células. Los estudios de la investigadora le abren las puertas a la ciencia para tratar de forma más rápida y oportuna a las pacientes con ese tipo de cáncer.
La familia de Ali Guarneros vivió momentos muy duros cuando después de que en el terremoto de 1985 tuvieron que migrar a Estados Unidos al resultar damnificados. Sin embargo, hoy en día la ingeniera aeroespacial desarrolla algunos de los dispositivos de exploración que la NASA utiliza en sus misiones espaciales.
Además, Guarneros no solamente tiene la misión de crear diversos componentes para las naves de la agencia estadounidense. También es la encargada de recibir a los estudiantes de todo el mundo que llegan a la organización para ayudarlos a elaborar sus diseños.
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Aurea Ramírez recibió en 2020 el premio Alejandrina debido al desarrollo de confitería funcional para apoyar a diversos pacientes a bajar de peso y controlar enfermedades cardiacas. Los dulces saludables que desarrolló la científica junto con los investigadores: Marcela Gaytán, Luz Abril Herrara, Iván Luzardo y Rocía Campos son hechos a base de bagazo de mango.
Con este trabajo, los científicos quisieron auxiliar a la población infantil que cuenta con obesidad. El dulce, además de que no contener grandes cantidades de carbohidratos, también cuenta con bioactivos y es una fuente de fibra.