El crowdfunding es un modelo de financiamiento en que participan varias personas para recaudar fondos y financiar distintos proyectos.
El crowdfunding, también conocido como financiación colectiva, es un modelo de financiamiento que se basa en la colaboración de múltiples personas para recaudar fondos destinados a apoyar la creación de proyectos, iniciativas o emprendimientos.
Esta es una forma alternativa de obtener recursos ante los préstamos bancarios. El crowdfunding permite que un gran número de individuos contribuyan con cantidades pequeñas o grandes de dinero para respaldar una causa específica.
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Generalmente ese modelo de financiación se lleva a cabo a través de plataformas en línea que facilitan la conexión entre los creadores de proyectos y los posibles financiadores. Los proyectos pueden abarcar diversas áreas, como arte, música, cine, etc.
Para “pagar” la contribución de quienes donaron su capital, los creadores del proyecto ofrecen algunas recompensas o incentivos. Estas recompensas pueden variar desde una mención de agradecimiento hasta la obtención del producto o servicio resultado una vez que esté terminado.
De acuerdo a la recompensa que se les da a los financiadores, el crowdfunding se divide en cuatro categorías.
Los financiadores reciben recompensas o incentivos no financieros a cambio de su contribución.
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Las personas que dieron su dinero otorgan préstamos al proyecto y se espera que sean reembolsados con intereses en un período de tiempo determinado.
Los financiadores reciben una participación en el proyecto o empresa en la que están invirtiendo.
Quienes se encargan de brindar el capital hacen contribuciones sin esperar nada a cambio, generalmente para causas benéficas o proyectos sin ánimo de lucro.
El crowdfunding ha abierto nuevas oportunidades para que los emprendedores, artistas y personas con ideas innovadoras obtengan financiamiento y hagan realidad sus proyectos.
También los financiadores de los proyectos resultan beneficiados al participar en este tipo de iniciativas ya que muchos de ellos pueden tener impacto en un área específica que les resulte particularmente interesante.
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Oculus VR, la empresa que actualmente pertenece a Meta y que se encarga de desarrollar tecnología de realidad virtual para materializar su metaverso, inició en 2012 como un pequeño proyecto que buscaba ser auspiciado a través de la página Kickstarter.
Durante el primer día de su lanzamiento la compañía visionaria logró reunir 669 mil dólares de más de 9 mil personas que apoyaron su visión.
Eso sin duda hizo realidad el sueño de Palmer Luckey, Brendan Iribe, Michael Antonov, Jack McCauley y Nate Mitchell de construir su empresa. Sin embargo, el sueño de esas 4 personas no paró únicamente ahí ya que en marzo de 2014 Facebook compró Oculus por 2 billones de dólares.