Cuidado con sextorsión: 4 medidas de ciberseguridad para protegerte
El creciente ambiente digital, las redes y la tecnología permiten que los cibercriminales actúen de nuevas formas. (Giorgio G/Adobe Stock/MIT SMR México)
Los hackers utilizan numerosas técnicas para llevar a cabo una sextorsión, esta palabra describe la obtención de imágenes o videos con contenido privado para extorsionar a la víctima. Aprende a evitar caer en esta trampa y cuidar tu intimidad.
La sextrorsión es una forma de chantaje sexual que implica la amenaza de difundir imágenes o videos íntimos para obtener dinero u otros beneficios. Lamentablemente con los avances tecnológicos, se ha convertido en una de las formas más insidiosas y dañinas de explotación actualmente.
Este delito, que combina elementos de explotación sexual y ciberacoso, tiene implicaciones devastadoras para las víctimas. Además, plantea serios desafíos para la sociedad y las autoridades.
Según el Barómetro Global de la Corrupción, en América Latina, el Caribe, Medio Oriente y el Norte de África, una de cada cinco personas ha sufrido o conoce a alguien que ha sufrido sextorsión. Esto al acceder a servicios gubernamentales como la atención sanitaria o la educación.
De acuerdo con información gubernamental, la mayoría de los casos de extorsión sexual surgen al compartir información íntima o privada. Por ejemplo una imagen o video de carácter sexual, incluso con una persona de mucha confianza.
Sin embargo, los hackers también son causantes de un gran número de este tipo de ataques. La sextorsión es un tema serio que es necesario combatir por medio de algunas practicas de ciberseguridad.
“Se han realizado 1 de 2 intentos de entrega”, esta es la nueva trampa que utilizan los hackers
¿Cómo evitar ser víctima de una sextorsión?
Los esquemas de sextorsión pueden desarrollarse de varias maneras. Un atacante puede instalar software espía en la máquina de la víctima, ya sea una computadora tradicional o un dispositivo móvil. Así podrá encender la cámara a distancia y grabar imágenes.
De manera similar, una víctima puede verse obligada a descargar malware mediante phishing y otros medios, Esto permite a un atacante robar contenido sexual que puede que ya esté almacenado en un archivo en esa máquina.
También, los delincuentes pueden hackear las cuentas o utilizar gusanos para conseguir que sean las mismas víctimas las que les envíen material incriminatorio. El siguiente paso es amenazar con hacer público todo el material recibido.
Nord VPN establece cuatro formas de evitar que los internautas caigan en esta trampa:
Ten cuidado con los archivos adjuntos a los correos electrónicos
No abras nunca archivos adjuntos de personas desconocidas y comprueba siempre que la dirección de correo electrónico es válida. Si abres un archivo adjunto sospechoso, se puede instalar un programa malicioso que permita a los cibercriminales acceder a tu cámara.
Nunca envíes contenido sexual a desconocidos
Si apenas conoces a la persona y nunca la has visto en el mundo real, no le envíes fotos ni vídeos de contenido sexual. Aunque pueda parecer obvio, mucha gente sigue cayendo en esta trampa. Cuando quieras compartir momentos íntimos con alguien que conoces y en quien confías, no le envíes nada por correo electrónico o aplicaciones de mensajería.
Utiliza contraseñas seguras
Evita utilizar la misma contraseña para todas tus cuentas y crea contraseñas seguras. Muchos ataques de sextorsión se producen por contraseñas filtradas o robadas, así que cuidarlas bien es una forma de evitar problemas.
Consigue una VPN
Una VPN redirige tu tráfico a través de un túnel encriptado para que tu navegación sea privada y tu información sensible esté segura. Algunas enmascaran tu dirección IP, asegurándose de que no está vinculada a tu identidad.
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