Ser un colaborador que realiza muchas actividades diferentes al mismo tiempo antes era visto como una ventaja laboral. Sin embargo, a lo largo de los años se le ha dado otra noción al término por los efectos negativos que puede tener para la salud mental.
El mercado laboral es bastante competido, lo que ha llevado a las empresas a buscar colaboradores que puedan realizar diversas tareas al mismo tiempo o fuera de su perfil profesional, sin embargo, el multitasking más allá de ser una práctica que mejore la productividad tiene efectos adversos.
La multitarea se refiere a la capacidad de realizar varias actividades o tareas al mismo tiempo. Esto puede incluir responder correos electrónicos mientras se participa en una videoconferencia, hablar por teléfono mientras se escribe un informe, etc.
La realidad es que el multitasking puede ser contraproducente. En lugar de aumentar la eficiencia, dividir la atención entre múltiples actividades puede resultar en una disminución de la calidad del trabajo y un aumento en los errores, de acuerdo con diversos informes.
Cuando los colaboradores se comprometen con más de una tarea a la vez, su cerebro no puede dedicar toda su atención a ninguna de ellas. Esto conduce a una menor capacidad para procesar información y tomar decisiones de manera efectiva.
De acuerdo con un reporte de Clockify, en un entorno empresarial, la multitarea puede provocar una disminución de la productividad, un aumento de errores y mayores niveles de estrés.
“Cuando los empleados cambian constantemente entre tareas, su capacidad para concentrarse y producir un trabajo de alta calidad disminuye“, se lee en el informe.
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Indeed explica que los colaboradores no solo corren peligros físicos al comenzar a prestarle atención a más de una tarea a la vez. Estos son algunos de los efectos negativos que tiene la práctica.
La multitarea puede llevar a los colaboradores a cambiar con frecuencia entre tareas en lugar de completarlas una a la vez.
Esto puede prolongar la cantidad de tiempo que les lleva terminar su trabajo y por lo tanto, su productividad se ve comprometida.
Los profesionales a menudo deben dedicar una gran parte de su memoria de trabajo a la multitarea.
Frente a esto, se pueden agotar los niveles de energía y capacidad para considerar nuevas ideas.
Ser un colaborador multitasking puede afectar la capacidad de un profesional para resolver problemas, analizar cuestiones complejas y generar soluciones creativas.
Es común que los profesionales pasen por alto detalles importantes al realizar múltiples tareas.
Es más, intentar realizar varias tareas simultáneamente puede provocar alteraciones de la memoria a corto plazo.
Con esto, ser multitasking puede afectar la capacidad de un profesional para recordar detalles sobre su trabajo y regresar a las tareas de manera efectiva después de tomar descansos.
Los profesionales que realizan múltiples tareas con regularidad pueden experimentar tasas más altas de estrés crónico debido a su exposición constante a trabajos que dividen la atención.
Aún más, dado que la multitarea puede hacer que los profesionales experimenten la posibilidad de cometer errores, una mayor duración de tiempo para completar las tareas y menores niveles de creatividad, puede afectar su salud mental.
Con esto, hacer más de una actividad puede resultar en que los profesionales experimenten tasas más altas de baja autoestima, ansiedad y depresión que sus contrapartes.
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