El trabajo combinado con las tareas de cuidados aumenta los niveles de estrés de las mujeres que son madres. Las empresas pueden apoyarlas con algunas medidas.
En México, siete de cada 10 mujeres trabajadoras son madres, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), las cuales no solo se enfrentan a problemas como el techo de cristal en los salarios, sino también al aumento de responsabilidad y cargas laborales por las tareas de cuidados.
De acuerdo con la Coordinadora del Hub Affor Health, Yunue Cárdenas, la falta de conciliación y programas de cuidado de la salud mental laboral, especialmente en las madres trabajadoras deriva en niveles elevados de estrés, ansiedad o burnout, lo cual impacta de forma negativa en su desarrollo profesional y en el crecimiento de las compañías.
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La experta explicó que estos efectos no son consecuencias de la maternidad, sino de la falta de condiciones para ejercerla, ya que aunque se han dado ciertos pasos para comenzar a conciliarla con las actividades laborales, aún hay retos respecto “a la atención y prevención de riesgos psicosociales en el trabajo, tanto para mujeres con hijos como para aquellas que no los tienen”.
Enfatizó en que se tienen que implementar políticas y medidas que promuevan la equidad y “protección de los derechos laborales de todas las personas”, pero en especial de las madres trabajadoras, ya que añadir programas de salud mental laboral y cuidado a colaboradores, tiene un impacto positivo no solo en la colaboradora, sino también en sus hijos.
Cárdenas recordó que apoyar a las madres trabajadoras tiene beneficios para los trabajadores y las empresas, ya que ellas tienen la capacidad de desarrollar diversas habilidades en negociación, trabajo en equipo, liderazgo, empatía, administración de tiempo, etc.
Y gracias a que mejoran los niveles de estrés y ansiedad de las madres trabajadoras y al brindar condiciones adecuadas para amamantar, se ven mejoras en la salud y desarrollo cognitivo de los niños, se reducen las posibilidades de depresión posparto, disminuye la mortalidad infantil, aumentan las tasas de inmunización y se abona a la equidad de género en el trabajo.
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Finalmente, Affor Health emitió algunas recomendaciones para que las organizaciones cuiden promuevan la salud mental en las mamás trabajadoras: