El retrato de Carlos III fue vandalizado, ¿qué otras obras han sido redecoradas?
Varios activistas y otros grupos de personas se han dedicado a destruir o intervenir obras artísticas históricas para mandar un mensaje al mundo. (@veganfoodliving)
Diversos manifestantes han tomado las obras de arte como el lienzo perfecto para externar sus opiniones, conoce seis de los casos más sonados.
Activistas por los derechos de los animales vandalizaron el nuevo retrato oficial del rey Carlos III mientras se exhibía en una galería de Londres. La asociación Animal Rising se adjudicó esta protesta y en su sitio calificó este acto como una redecoración.
Durante la protesta, dos sujetos pegaron el rostro del famoso protagonista de la saga de dibujos animados Wallace & Gromit con el siguiente díalogo: “No más queso, Gromit. Mira toda esa crueldad en las granjas de RSPCA”.
La acción intentó llamar la atención del público sobre un trabajo de investigación de la organización donde se encontró que en 45 granjas avaladas por la Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (RSPCA) se encontraron prácticas de crueldad animal severa.
“La acción alegre aprovechó el amor del Rey por Wallace y Gromit y su condición de Patrón Real de la RSPCA. Animal Rising ha pedido al Rey que suspenda su apoyo a la organización benéfica”, explicó Animal Rising.
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No solo fue Carlos III, ¿qué otras obras han sido vandalizadas?
Por ser el último en su tipo, actualmente el caso del retrato de Carlos III es uno de los grandes ejemplos de la forma en la que diversos grupos de activistas toman las obras artísticas y las intervienen con el objetivo de hacer llegar un mensaje al mundo.
Estos son otros ejemplos de acciones similares:
1. Sopa de calabaza sobre la Mona Lisa
En enero de 2024 miembros del grupo ecologista Riposte Alimentaire salpicaron la Mona Lisa, la obra más reconocida de Leonardo da Vinci con sopa de calabaza.
La protesta en el famoso museo parisino del Louvre fue un esfuerzo para llamar la atención sobre la inseguridad alimentaria en Francia.
De acuerdo con Sacha y Marie-Juliette, dos ciudadanas que están a favor de la organización les gustaría no participar en estos actos, pero no existen los medios legales para proteger a los ciudadanos de todo el mundo del hambre.
“Personalmente me gustaría no tener que hacer esto. Me gustaría que los medios legales fueran un medio eficaz, pero no es así y no nos queda más remedio que entrar en el juego de los medios de comunicación”.
Sasha et Marie-Juliette, deux citoyennes soutenant Riposte Alimentaire, expliquent le choix de leur action au musée du #Louvre sur @franceinter dans l’émission de @CamCrosnier.
— Riposte Alimentaire (@riposte_alim) January 31, 2024
📻👉https://t.co/fnBCfVC7Ul#Joconde #A22Network #RiposteAlimentaire
2. El graffiti sobre la Guernica de Picasso
En 1974 Tony Shafrazi entró en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, donde el Guernica de Picasso había estado en préstamo a largo plazo, y pintó con aerosol las palabras “MATAR A TODAS LAS MENTIRAS” en la obra modernista.
La frase era, de hecho, una referencia a una protesta por la liberación de William Caley, un teniente que había sido condenado por su papel en la masacre de My Lai durante la guerra de Vietnam.
Shafrazi también había estado involucrado en acciones contra la guerra lideradas por la Art Workers Coalition.
3. La Fuente de Marcel Duchamp
En 1993 un artista de performance francés llamado Pierre Pinoncelli orinó en la pieza Fuente de Marcel Duchamp y luego procedió a golpearla con un martillo. Como consecuencia, lo mandaron a prisión durante un mes y le hicieron pagar una multa millonaria.
Pero esto no le impidió tocar la pieza una vez más, en 2006 en París, fue al Centro Pompidou donde la obra dadaísta estaba expuesta. En esa ocasión quitó de la pared la escultura.
Según una nota de prensa, este sonado ataque artístico oscureció el resto de la carrera de Pinoncelli que dejó de pintar en 1966 pero que nunca ha dejado de denunciar las contradicciones de la sociedad.
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4. El vómito azul sobre la obra de Piet Mondrian
Inicialmente se pensó que se trataba de un “incidente desafortunado”, como lo describió el Museo de Arte Moderno pero en 1996, el estudiante de arte canadiense Jubal Brown llegó a esa institución de Nueva York y procedió a vomitar azul sobre una abstracción de Piet Mondrian.
Resultó que, varios meses antes, había hecho algo similar: arrojar rojo sobre un cuadro de Raoul Dufy en la Galería de Arte de Ontario. Incluso cuando ambas instituciones consideraron emprender acciones legales contra él, Brown parecía orgulloso de sus protestas.
Tenía como objetivo alterar la cultura burguesa. Inicialmente había planeado las acciones como una trilogía, con una tercera que implicaría pintar de amarillo en una obra desconocida. Pero nunca lo realizó.
5. Obra de Van Gogh cubierta de sopa
En 2022 dos activistas que forman parte de la organización Just Stop Oil se manifestaron contra el uso de los combustibles fósiles arrojando sopa de tomate Heinz enlatada sobre la icónica obra de arte Girasoles de Van Gogh en una galería de Londres.
En respuesta al incidente, la Galería Nacional compartió actualizaciones sobre el estado de la pintura. “Hay algunos daños menores en el marco, pero la pintura está ilesa”, escribió la galería, explicando que la pieza estaba vidriada para protegerla de cualquier daño potencial.
Just Stop Oil se describe como “una coalición de grupos que trabajan juntos para garantizar que el Gobierno se comprometa a detener la producción y concesión de nuevas licencias de combustibles fósiles”.
6. La sopa Campbell’s de Andy Warhol también fue redecorada
En 2022 dos activistas climáticos en Canberra, Australia, rediseñaron el portafolio Sopa Campbell de Andy Warhol al dibujar sobre la obra garabatos azules y palmas pegadas.
No se produjeron daños a las obras físicas ya que estaban cubiertas con vidrio protector. Los manifestantes climáticos responsables están asociados con el grupo Stop Fossil Fuels Subsidies (SFFS) que solicita apoyo para que el gobierno australiano ponga fin a los subsidios a los combustibles fósiles.
“Estamos en una emergencia de crisis climática”, dijo un manifestante.
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