La mujer como factor preponderante en la industria sustentable
La inclusión de las mujeres en la toma de decisiones a todos los niveles es fundamental para garantizar una representación equitativa de intereses y perspectivas en la industria sustentable.
Las mujeres somos clave para alcanzar el desarrollo sustentable. No me refiero a que poseamos todas las soluciones o que únicamente nosotras seamos quienes revolucionen los métodos de producción o los modelos de negocio.
Sin embargo, la percepción femenina de la realidad ayuda a completar el panorama de las acciones y decisiones que tienen que tomarse para enfrentar retos como la escasez de agua, el cambio climático y sus causas.
En un mundo donde la sustentabilidad se ha vuelto una preocupación urgente en la búsqueda de un futuro positivo.
Además, la participación activa de las mujeres en la industria sustentable emerge como un factor esencial para impulsar el cambio hacia prácticas más responsables y equitativas.
Históricamente, las mujeres hemos desempeñado roles fundamentales en la gestión de recursos naturales, la conservación del medio ambiente y el desarrollo comunitario.
Ahora, más que nunca, nuestro liderazgo y contribuciones son vitales para garantizar, entre otras cosas, la disponibilidad de recursos para las generaciones venideras.
La Organización de las Naciones Unidas reconoce que debido a que las mujeres constituyen más de 50 por ciento de la población mundial, representan una gran fuerza creativa y productiva en los diversos sectores de la sociedad, tanto políticos como económicos, socioculturales e industriales.
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Influir en las elecciones de consumo
La incorporación de la perspectiva de género en la industria sustentable es crucial por varias razones.
En primer lugar, y desde los ámbitos más particulares, el género femenino suele estar más vinculado a la gestión de los recursos naturales a nivel local.
En comunidades rurales y áreas agrícolas, las mujeres son las encargadas de actividades como la agricultura, la recolección de agua y la gestión forestal.
El conocimiento tradicional y la relación cercana con el entorno natural otorgan una comprensión única de los desafíos ambientales y las soluciones potenciales.
El papel tradicional de administradoras de los recursos desempeña una parte significativa pese al cambio de los tiempos, en los que ya estamos involucradas en muchos otros círculos y posiciones de toma de decisiones.
El rol significativo en situaciones relacionadas con la alimentación, la energía y el consumo de recursos proviene de la capacidad para influir en las elecciones de consumo, lo que nos convierte en agentes clave para fomentar prácticas más sustentables en el día a día.
Construcción de entornos más conscientes
Para apoyar la incorporación del enfoque de género en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer aprobó en el 60º periodo de sesiones en 2016 una hoja de ruta que facilita la inclusión de la perspectiva de género en la implementación de los ODS.
Esto se establece en el estudio “La Mujer: pieza clave en el desarrollo sustentable. Estrategias contenidas en la Agenda 2030”, publicado por la Universidad Rey Juan Carlos, de España.
El mismo documento señala que la falta de indicadores claros es un gran obstáculo para medir el avance de la incorporación femenina en los procesos nacionales y para evaluar con claridad las acciones que todavía se requieren para lograr la plena incorporación de la mujer en los diversos ámbitos sociales, políticos, económicos y culturales.
Sin embargo, también hay avances. Al educar sobre la importancia de la conservación y el uso eficiente de los recursos, la contribución femenina abona directamente a la construcción de entornos más conscientes y responsables.
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Mujeres lideran la visión sustentable
En el ámbito empresarial, cada vez más mujeres están liderando iniciativas innovadoras en favor de la sostenibilidad.
Día a día, vemos a mujeres emprendedoras fundar empresas centradas en la ecoeficiencia, la energía renovable, la industria sustentable y otras áreas clave.
Su enfoque holístico, que combina la rentabilidad económica con el impacto social y ambiental positivo, está transformando la forma en que concebimos los negocios y su relación con el medio ambiente.
La inclusión de las mujeres en la toma de decisiones a todos los niveles es fundamental para garantizar una representación equitativa de intereses y perspectivas en la industria sustentable.
Diversos estudios demuestran que la diversidad de género en los equipos directivos conduce a una toma de decisiones más efectiva y a una mayor innovación.
Futuro sustentable y equitativo
Al promover la igualdad de oportunidades y eliminar los sesgos de género en el lugar de trabajo, las empresas pueden aprovechar al máximo el talento y la creatividad de todas sus empleadas.
Al empoderar a las mujeres a través de la educación, la capacitación y el acceso equitativo a oportunidades económicas, podemos fortalecer su contribución a la construcción de un futuro sustentable y equitativo para todos.
Nuestra participación activa en la industria sustentable es esencial para abordar los desafíos ambientales, sociales y económicos que enfrenta el mundo.
La experiencia, liderazgo y perspectivas únicas son fundamentales para impulsar la innovación y el cambio transformador hacia un modelo de desarrollo más equitativo y respetuoso con el medio ambiente.
Al reconocer y apoyar el papel preponderante de las mujeres en este campo, podemos avanzar hacia un futuro positivo para las generaciones presentes y futuras.
SOBRE LA AUTORA
Gabriela Valdés es directora de soluciones digitales de Ecolab Latinoamérica.