Un youtuber ahora puede ganar dinero publicando videos. Esta es la economía del creador. Pero, ¿qué pasará cuando el metaverso se haga más presente?¿Quienes serán los dueños de las nuevas creaciones en los universos virtuales? El copyright tiene que evolucionar.
La propiedad intelectual ha evolucionado a lo largo del tiempo y se ha adaptado al esquema digital, aunque aún existen dudas sobre cuál será su futuro en la Web 3.0.
Georgios V. Efstratiadis, CEO de Toroblocks, platicó durante el Foro MIT Sloan 2022 sobre cuáles serán los retos que los creadores 3.0 tendrán que enfrentar cuando sus producciones se encuentren en el metaverso.
“Anteriormente las personas simplemente podrían decir que eran dueños de un pedazo de tierra con un testigo que los apoyara, sin embargo, la naturaleza de las propiedades y creaciones evolucionaron hasta volverse intangibles, ¿cómo puedes reclamar un NFT o un reel de Instagram?”, expresó.
Un nuevo motor económico surgió desde hace algunos años: la economía del creador. Gracias a ella Google gana dinero por la publicidad que ha anclado a los vídeos de los youtubers.
Los creadores ganan solo un pequeño porcentaje de los productos que realizan, esto se vuelve injusto al analizar la cantidad de creaciones que los usuarios de la red producen. En Estados Unidos se transmiten 694 millones de canciones por minuto, según Efstratiadis.
“¿Cómo se ve un poema, cómo se ve una canción, cómo se ve un blog en el metaverso? ¿Cómo puedo controlar mi propio trabajo dentro de ese lugar? Hasta ahora no hay protocolos comunes establecidos entre plataformas respecto a la propiedad intelectual”, dijo el CEO de Toroblocks.
Este es el problema al que actualmente se enfrentan los youtubers, tiktokers y bloggers en la Web 2.0, pero eventualmente la red evolucionará y le dará paso a la Web 3.0 que presentará otros retos debido al desarrollo de nuevas tecnologías.
El metaverso que Meta, empresa creada por Mark Zuckerberg, promete la creación de nuevos mundos 3D, esto representará una importante revolución tecnológica, la cual se debe reflejar en nuevos esquemas de copyright.
“Las posibilidades que la nueva tecnología traerá son realmente infinitas. La propia creatividad cambiará porque las herramientas están evolucionando. Imagina crear esculturas de la nada con solo mover las manos, y que estas obras puedan ser vendidas y compradas”, mencionó el líder.
En esta nueva etapa, se necesitarán nuevos protocolos que todo el mundo vaya a utilizar y herramientas que integren el mundo virtual y físico para que resuelvan el problema de la propiedad de una vez por todas.
De acuerdo con Efstratiadis, es necesario que los arquitectos de las próximas tecnologías empiecen a idear soluciones a estos problemas futuros, ya que se generarán nuevas industrias cuya propiedad intelectual necesitará ser protegida. Por ejemplo, la industria de la moda y de los accesorios para los avatares.
“Eso es exactamente lo que el nuevo mundo va a permitir. Va a permitir que cada uno de nosotros sea creativo de una manera diferente, que sea creativo en línea y que salga demuestre su creatividad. Porque la creatividad va a ser muy valorada”.