Los 4 síndromes que más afectan a los líderes

A pesar de los esfuerzos, el 52 por ciento de los colaboradores no confían en sus líderes, de acuerdo con el Global Leadership Forecast de la consultora DDI.

Saskia de Winter, socia fundadora y directora general de Saskia de Winter Training, opina que existen cuatro tipos de síndromes que afectan a los líderes y es importante aprender a identificarlos con la finalidad de que no afecte el desempeño laboral.

“Para tener un equipo exitoso es necesaria la comunicación efectiva, empatía, humildad, constante aprendizaje, el reconocimiento activo de fallas, y aún más importante, la propuesta de ideas para generar cambios positivos”, comentó la líder de la firma de capacitación empresarial e individual.

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Los 4 síndromes del liderazgo, ¿te identificas con alguno?

Cualquier directivo o gerente debe estar al pendiente de estos síndromes para evitar malas prácticas en los liderazgos de cualquier empresa.

A continuación, conoce en qué consiste el síndrome de Cronos, Hammurabi, Napoleón y Hubris, desde la visión de la experta.

1. Síndrome de Cronos

Este tipo de líder solo se dedica a anular el talento ajeno. Particularmente, lo hace con el fin de no sentirse desplazado. Se puede identificar a la hora de dar retroalimentación—sobre todo cuando un líder no da ningún tipo de comentario positivo—y puede afectar la motivación de mediano y largo plazo en un equipo de trabajo. Leer más

2. Síndrome de Hammurabi

El líder que vive con el síndrome de Hammurabi crea procesos laberínticos para que nadie pueda avanzar la comunicación al interior de un equipo de trabajo. Estas trabas se establecen para paralizar por completo cualquier tipo de diálogo en una organización. Si se cae en esta práctica, muy rápidamente una empresa completa puede comenzar a colapsar.

3. Síndrome de Napoleón

Como el nombre lo indica, el de Napoleón es un síndrome para líderes tiranos. Aquellos que humillan públicamente a sus colaboradores, incluso mediante ofensas y amenazas. Su poder viene del miedo y, por lo mismo, es difícil que logren contagiar entusiasmo en sus equipos de trabajo, que probablemente viven buscando trabajo perpetuamente.

4. Síndrome de Hubris

El peor síndrome de malos líderes es el de Hubris, considera la experta. Esto se debe a que la arrogancia nubla el juicio de las cabezas de equipo. Las y los líderes no pueden inyectar confianza a su equipo de trabajo de tal modo que termina sin concretar proyectos de gran calado porque se quedan, irremediablemente, solos. Leer más