El ron, con su rica historia y sabor distintivo, se ha ganado un lugar especial en la cultura global. Originario del Caribe, esta bebida destilada a base de caña de azúcar ha trascendido fronteras y generaciones, convirtiéndose en un símbolo de celebración, aventura y tradición.
Una de las razones por las que esta bebida es tan querida es su increíble versatilidad. Existen muchos tipos de ron, que van desde el blanco, ligero y suave, hasta el oscuro, fuerte y con sabores profundos. También se encuentran rones especiados, añejados, y versiones premium que compiten con los mejores whiskies y brandies del mundo.
Esta variedad permite que el ron se adapte a una amplia gama de gustos y preferencias. Ya sea que se disfrute solo, con hielo, o en cócteles clásicos como el Mojito, la Piña Colada o el Daiquiri, este tipo de alcohol ofrece una experiencia que puede ser tan simple o tan compleja como el bebedor desee.
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El ron ha sido, y sigue siendo, una bebida de celebración. Desde bodas hasta fiestas en la playa, el ron es una elección popular cuando se trata de levantar el ánimo y disfrutar de buenos momentos con amigos y familiares.
Su capacidad para combinarse bien en cócteles lo hace ideal para eventos sociales, donde la música y la diversión son protagonistas.
Sin embargo, los dos países que más aman tomar esta bebida, son India y Filipinas, que también son los principales fabricantes de productos derivados del ron, según Mordor Intelligence.
Por ejemplo, la marca filipina líder de esta licor Tanduay, vendió más de 23 millones de cajas de 9 litros en 2021.