Nuevos datos muestran que ofrecer oportunidades de crecimiento motiva a los colaboradores a quedarse a pesar de tener líderes mediocres.
En un mercado laboral en el que la oferta de talentos es limitada, retener a los trabajadores cualificados es crucial. Por eso es importante entender por qué la gente se queda y por qué se va. En muchas compañías existen líderes mediocres, en ese caso lo mejor es ofrecer una trayectoria profesional sólida.
Durante el pico de la pandemia, muchos trabajadores se quedaron en casa. Los que tenían trabajo querían quedarse, dada la incertidumbre. Cuando el trabajo se volvió virtual para tanta gente, con una pantalla de computadora como único vínculo con los colegas, los gerentes ocuparon un lugar destacado.
Los líderes que mostraban empatía con los miembros de su equipo fomentaban equipos comprometidos y de mayor rendimiento. Los describí en ese momento como el hilo que conecta a las personas con el trabajo.
Pero, a medida que se ha ido aliviando el gran peso de la pandemia, la gente empieza a preguntarse “¿qué va a pasar en los próximos años?“. Los colaboradores están mirando más allá de sus roles actuales, hacia el futuro.
Este es un hallazgo reciente de Culture Amp. Hay un cambio perceptible en lo que impulsa las intenciones de los colaboradores a quedarse. Sí, la empatía y la comodidad de un buen gerente siguen siendo una razón por la que la gente se queda en las empresas. Pero no es la razón más importante.
En 2021, las oportunidades profesionales fueron el séptimo impulsor más fuerte del compromiso de un colaborador de quedarse. En 2023, fueron el segundo más fuerte. Y es el tipo de oportunidades que tiene una empresa para la trayectoria profesional ahora es lo principal.
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Un factor que agudiza el enfoque de las personas cuando piensan en la trayectoria profesional dentro de sus empresas es que ahora hay más opciones fuera de ellas. El mercado de trabajadores autónomos cualificados está creciendo rápidamente.
Esto reduce los costes de fricción que supone pasar al trabajo autónomo y buscar otras organizaciones y oportunidades disponibles. Los rápidos avances en plataformas de búsqueda de empleo como Upwork y Fiverr han ampliado el mercado de la contratación.
En una encuesta de 2023, el 38 por ciento de los colaboradores informaron que habían trabajado como autónomos, es decir, 64 millones, frente a los 60 millones del año anterior. Las organizaciones que se construyen en parte en torno a los trabajadores autónomos cualificados de sus ecosistemas de fuerza laboral están surgiendo como una norma en lugar de una excepción.
Cuando las personas buscan oportunidades de trabajo independiente y perspectivas de desarrollo en su organización actual, se preguntan: “¿Quién aquí es capaz de brindar estas oportunidades?“
Sin duda, cuando se trata de generar compromiso, los directivos pueden desempeñar un papel clave. Los mejores directivos capacitan a los miembros de su equipo, los incentivan para que sean más hábiles, les brindan orientación, etc.
Los buenos directivos también, a través de su competencia de selección, se aseguran de que los miembros del equipo tengan colegas de alto rendimiento.
Pero, sobre todo después de la pandemia y en un momento de inestabilidad económica y laboral, los empleados sienten que las oportunidades están determinadas por factores más amplios que un buen o mal gerente.
Así, si bien un gerente puede desempeñar un papel en el fortalecimiento de la historia de crecimiento de la empresa, gran parte de la realidad de cómo se crea realmente la progresión profesional recae en los líderes de la empresa.
Son los líderes quienes deciden cómo se estructura la empresa y cómo fluye el trabajo. Son los líderes los responsables últimos de su crecimiento.
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Los líderes que quieran actuar en función de esta percepción se enfrentan a desafíos. Un análisis de la encuesta Culture Amp mostró que, entre 2020 y 2024, hubo un descenso global en la confianza de los colaboradores en cuanto a que existen buenas oportunidades profesionales en sus empresas.
¿A qué se debe esto? Sin duda, en lo que respecta a los directivos, la confianza se ha mantenido estable. Los directivos son apreciados por sus subordinados cuando se preocupan genuinamente por su bienestar.
Pero desde 2022, la confianza en los líderes de alto nivel ha disminuido a nivel mundial en tres capacidades vitales:
Siempre ha sido importante que los líderes reconozcan y comprendan que su comportamiento y su discurso desempeñan un papel importante en el compromiso. Pero en estos tiempos de turbulencia económica, este papel se amplifica.
Los mejores líderes lo entienden y atraen a sus empleados alineando de manera proactiva la pregunta más crucial de los trabajadores: “¿Creceré en esta empresa?”.
Al hacerlo, están posicionando los intereses de los empleados a la par de los intereses de la empresa. Para las empresas que buscan tanto hacer crecer como conservar a sus mejores talentos, esto es un beneficio para todos.
Lynda Gratton (@lyndagratton) es profesora de prácticas de gestión en la London Business School y fundadora de HSM Advisory. Su libro más reciente es Redesigning Work: How to Transform Your Organization and Make Hybrid Work for Everyone (MIT Press, 2022).