Claudia Sheinbaum será la nueva presidenta de México y tomará posesión del cargo el 1 de octubre de 2024. Con esto, la representación de las mujeres en la política logra un avance histórico en el país.
México tendrá por primera vez en su historia a una mujer presidenta. Eso representa un hecho histórico ya que desde 1911, año en el que se celebraron las primeras elecciones en el país, el ejecutivo Federal nunca había sido ocupado por una representante popular.
Claudia Sheinbaum será la nueva mandataria para el periodo 2024-2030. Con esto, México se suma a la lista de países que son dirigidos por una mujer.
Durante su primer mensaje tras darse a conocer el conteo rápido del Instituto Nacional Electoral (INE) que la favorecía con hasta 30 puntos frente a su oposición, la virtual ganadora agradeció a la ciudadanía.
“Este es el reconocimiento del pueblo de México a nuestro proyecto de transformación. Agradezco también porque, por primera vez en 200 años de la República, me convertiré en la primera mujer presidenta de México”.
Claudia Sheinbaum hace historia: “Me convertiré en la primera presidenta de México”
Las mujeres que han deseado obtener un cargo público no han tenido un camino fácil a pesar de que desde la Independencia de México su participación en la toma de decisiones políticas fue crucial.
Josefa Ortiz de Domínguez y Leona Vicario son las más conocidas, pero hubo muchas más que dieron pie a la formación del país.Cuando el cura Hidalgo empezó su movimiento, tenía un ejército de 800 hombres y mujeres. Cuatro meses después este número aumentó hasta los 80 mil, según la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Durante la Revolución mexicana, las mujeres hicieron su mayor esfuerzo por consolidar a la nación y tuvieron papeles clave en los ejércitos de los luchadores sociales y en la creación de propaganda.
“Sólo 50 años después la demanda de las mujeres por el derecho al voto es escuchada. En los siguientes periodos los derechos de las mujeres se presentaron de manera clara. Las mujeres políticas toman esas demandas en un proceso con altibajos”, según la institución.
La participación de las mujeres por el derecho al voto estuvo presente en el Congreso Constituyente. En 1916 Hermila Galindo presentó la propuesta de otorgar el voto a la mujer para que pudieran participar en las elecciones para diputados.
Sin embargo, fue hasta octubre de 1953 que se les permitió votar a las mujeres. A partir de ese momento no existió impedimento legal para la participación política, pero sí obstáculos en la forma de participación debido a la discriminación.
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Desde 1982 Rosario Ibarra de Piedra del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) fue la primera candidata a la presidencia, fue seguida por Marcela Lombardo Otero en 1994, Patricia Mercado en 2006 y por Josefina Vázquez Mota en 2012. Fue hasta 2024 que Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez se registraron como contendientes.
La lucha por ocupar un cargo como representantes ejecutivas no solo se vivió a nivel nacional. También varias mujeres lucharon por obtener la gubernatura de distintas entidades. Griselda Álvarez Ponce de León se convirtió en la primera gobernadora del estado de Colima en 1979.
Hasta 2023 México tenía 10 gobernadoras:
En 1944 Aurora Jiménez se convirtió en la primera diputada federal en México. María Lavalle Urbina fue la primera senadora por el estado de Campeche en la XLVI legislatura.
De acuerdo con un análisis hecho por The Conversation, la elección de mujeres para altos cargos no implica un cambio significativo en el poder. Es lo que los expertos en mujeres políticas llaman “representación descriptiva”, cuando los líderes políticos se parecen a un grupo de votantes pero no establecen políticas diseñadas para protegerlos.
Sonia Álvarez, Mala Htun y Jennifer Piscopo, expertas en el fenómeno, descubrieron que los logros políticos de este grupo, rara vez se traducen en avances para las mujeres en los espacios privados. Algunos ejemplos son el derecho a la libertad reproductiva o la protección contra la violencia doméstica.
“En otras palabras, México puede haber superado a muchos países en la promoción de mujeres a puestos de liderazgo político. Pero aún no se ha despojado de su estigma del machismo y de su historia de autoritarismo”.
En 2014 el artículo 41 Constitucional fue reformado y estableció que los partidos políticos tendrán que postular paritariamente sus candidaturas para los Congresos Federal y locales. Esto dio pie al principio de paridad de género.
A pesar de este hecho, durante los últimos años las cifras de feminicidio en el país no han descendido de forma significativa. En 2018 se registraron 898 feminicidios, en 2019 fueron 941, 2020 registró 946, en 2021 tuvieron lugar 981, hubo 954 en 2022, 850 en 2023 y en lo que va de 2024 se han registrado 190; según datos del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt).