Los romances en la oficina le han costado el empleo a varios líderes. Te contamos los casos más polémicos y lo que establece la ley en México sobre este tema.
La flecha de Cupido también apunta en el trabajo. En muchas compañías, los romances en la oficina no son un problema mientras se manejen con discreción y transparencia. Sin embargo, la historia recuerda que hasta los líderes más poderosos han truncado sus exitosas carreras por un affair mal gestionado.
Los ejemplos abundan en el mundo empresarial y van desde la filtración de correos íntimos hasta conflictos de interés no declarados. Todos con una lección en común: mezclar lo personal con lo profesional puede tener un alto costo.
MIT SMR México se financia mediante anuncios y sociosEs importante destacar que tener un romance en la oficina no siempre implica un despido automático, pero sí puede abrir la puerta a investigaciones internas, sanciones y daños a la reputación de la organización.
No obstante, cuando esta situación involucra a las cúpulas directivas, las consecuencias tienden a ser más graves.
40 y 20: Quita el velo romántico de las relaciones tóxicas y violentas en el trabajo
Aunque el tema de los affairs en la oficina está experimentando un nuevo escrutinio, el amor en las empresas está más que presente desde hace años y, en algunos casos, normalizado.
Esto no quiere decir que sea lo más correcto en términos éticos o de valores corporativos.
Un estudio de Blind, la red anónima de trabajo con más de 3.2 millones de usuarios verificados, reveló interesantes hallazgos sobre el romance en la oficina. La firma encuestó a 8 mil 784 empleados de grandes compañías para conocer su disposición a explorar relaciones extracurriculares con compañeros de trabajo.
Contrario a lo que se pensaría Recursos Humanos, el área con más romances en la oficina, con un 42 por ciento.
El siguiente grupo más entusiasta en el amor es Marketing y Comunicación, donde 39 por ciento ha tenido citas internas y 54 por ciento habla abiertamente de su vida amorosa laboral.
Otros departamentos como el de Ventas, Servicio y Soporte registran un 36 por ciento de relaciones entre colegas.
Respecto al tema de la opinión sobre las relaciones laborales, el 32 por ciento de los líderes son quienes más reportan que el trabajo afecta su vida amorosa.
Que las empresas conozcan estas tendencias puede ayudarles a diseñar políticas internas que protejan la ética y la reputación, sin privar o castigar la vida personal de su fuerza laboral.
Aunque muchas organizaciones y empleados consideran que las relaciones en el trabajo son un tema sensible y pocas veces discutido, Kyum Kim, cofundador de Blind, señala que la advertencia de no involucrarse con compañeros podría estar basada en expectativas poco realistas, dejando entrever que el romance en la oficina es más común y manejable de lo que se cree.
“A menudo escuchamos el consejo de no salir con compañeros de trabajo, pero esa sabiduría podría basarse en expectativas poco realistas”.
En los últimos años, varios ejecutivos de alto nivel han sido protagonistas de titulares por sus relaciones dentro del trabajo. Aquí algunos de los ejemplos que fueron mediáticos.
En julio de 2025, el CEO fue captado en un concierto de Coldplay junto a Kristin Cabot, directora de Recursos Humanos de la empresa. El episodio se viralizó cuando la pareja apareció en la kiss cam, lo que derivó en una solicitud de divorcio por parte de Megan Karrigan, entonces esposa de Cabot.
Aunque en un inicio el romance en la oficina no generó un despido inmediato, la presión interna aumentó hasta que Byron presentó su renuncia, la cual fue aceptada por la Junta Directiva, de acuerdo con informes de la compañía.
En 2019, el director ejecutivo perdió su puesto tras descubrirse que mantenía relaciones con colaboradoras y que había enviado fotos íntimas desde su correo corporativo.
La compañía determinó que Easterbrook violó el código de conducta, lo que derivó en su despido fulminante y millonarias demandas posteriores.
Este caso de romance en la oficina evidenció que, más allá de lo personal, el uso de recursos de la empresa y la falta de transparencia pueden convertirse en faltas graves que destruyen una carrera en segundos.
El exejecutivo de Enron, protagonizó uno de los romances en la oficina más polémicos de Wall Street.
Pai vendió acciones de la compañía por 250 millones de dólares y renunció para divorciarse y casarse con una bailarina profesional.
Su salida coincidió con la crisis financiera de la empresa, lo que alimentó sospechas de conflictos de interés. El caso mostró cómo lo personal puede mezclarse con decisiones corporativas de gran impacto y convertirse en un factor de desconfianza frente a inversionistas y reguladores.
En mayo de 2025, el CEO de Kohl’s, fue despedido tras revelarse que firmó contratos con la empresa de su novia sin informar a la junta directiva.
Aunque se trataba de un romance en la oficina fuera de la jerarquía inmediata, la falta de transparencia fue considerada una violación al código de ética y un claro conflicto de interés.
El caso deja como recordatorio de que la omisión en declarar vínculos personales puede tener consecuencias irreversibles, incluso para los altos ejecutivos.
En términos legales, tener un romance en la oficina no es motivo directo de despido.
La Ley Federal del Trabajo establece que el empleador solo puede rescindir un contrato sin responsabilidad cuando el empleado incurre en conductas graves que afecten el centro de trabajo o a alguno de los miembros de su equipo.
Sin embargo, las empresas sí pueden intervenir cuando:
En otras palabras, lo que se sanciona no es el romance, sino las implicaciones éticas y profesionales que este pueda tener.
Para quienes viven un romance en la oficina, existen algunas recomendaciones que ayudan a proteger tanto su relación como su carrera profesional:
La línea entre lo personal y lo laboral es cada vez más delgada, sobre todo en entornos corporativos de alta exposición.
Por ello es importante entender que un romance en la oficina no es un delito ni una falta laboral en sí misma, pero cuando involucra jerarquías, uso de recursos o falta de transparencia, puede convertirse en causal de despido. Sin olvidar que la confianza de un líder es el verdadero capital en juego.
Por ello es importante entender que un romance en la oficina no es un delito ni una falta laboral en sí misma, pero cuando involucra jerarquías, uso de recursos o falta de transparencia, puede convertirse en causal de despido. Sin olvidar que la confianza de un líder es el verdadero capital en juego.
3 ventajas y desventajas de tener un romance en la oficina