A medida que las tecnologías se vuelven más sofisticadas y los datos proliferan, los fabricantes tienen la oportunidad de transformar su forma de hacer las cosas a través de una tecnología emergente llamada hilo digital.
El hilo digital no es una panacea. Se enfrenta a desafíos reales. Dos de ellos se relacionan con la creciente necesidad de alta potencia informática y trabajadores calificados.