Lecciones de liderazgo de Napoleón Bonaparte, el arte de formar un imperio

Napoleón Bonaparte es un símbolo máximo del poderío que Francia tuvo entre los demás países. Temido por muchos y amado por su nación, este hombre convirtió a su país en una de las potencias europeas más importantes del mundo.

De acuerdo con información de Royal Museums Greenwich, él fue uno de los generales más exitosos de los ejércitos revolucionarios franceses. Además fue emperador de Francia entre 1804 y 1814, y en 1815.

Nació el 15 de agosto de 1769 y se educó en una escuela militar en Francia. Luego se unió al ejército donde, después de que estalló la Revolución Francesa, ascendió de rango.

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Este personaje fue tan importante para su país que en el Museo de los Inválidos, hicieron una estancia en donde guardan los restos del emperador francés.

Según la página oficial del propio museo, las cenizas del Emperador Napoleón fueron trasladadas a los Inválidos el 15 de diciembre de 1840 esperando la construcción de la tumba. Esta fue encargada en 1842 por el rey Luis Felipe al arquitecto Visconti (1791-1853).

“La tumba, realizada en bloques de cuarcita roja, situada sobre un pedestal de granito verde de los Vosgos, está rodeada de una corona de laureles y de inscripciones que recuerdan las grandes victorias del Imperio”.

Lecciones de liderazgo de Napoleón Bonaparte

Napoleón surgió en un momento de gran inestabilidad política durante la Revolución Francesa. Después de años de agitación y violencia, logró consolidar el poder. Su ascenso al poder puso fin al caos reinante y proporcionó a muchos franceses un sentido de orden y seguridad.

Este antiguo general no solo dejó huella en su país, ya que logró hacer el Código Napoleónico, mismo que fue importante porque codificó todo el derecho francés. De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), este proceso respondió a una visión centralizadora del Estado.

“De esta forma se extendieron por toda Francia los mismos registros del Estado civil, las mismas circunscripciones territoriales, las mismas administraciones, los mismos tribunales y, sobre todo, las mismas leyes”.

Con lo que se hizo uno de los primeros códigos civiles en el mundo, mismo que fue replicado en otros países.

Así de importante fue Napoleón, por lo tanto, si quieres que tu liderazgo sea tan efectivo como el de este hábil hombre, deberás poner atención a los siguientes puntos de la lista.

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1. Fue ambicioso desde el inicio

Napoleón tenía una visión clara y ambiciosa. Desde sus primeros días en el poder, tenía un objetivo claro de expandir el imperio francés y dejar su huella en la historia. Su ambición y visión a menudo inspiraban a sus seguidores.

De acuerdo con la institución, Royal Museums of Greenwich, los logros de Napoleón llegaron mucho antes que su nombramiento como emperador. Por ejemplo, en 1796 era comandante del ejército francés y, en un intento de perturbar las rutas comerciales británicas con la India, conquistó el Egipto gobernado por los otomanos en 1798.

Esto lo hizo regresar a Francia como un líder heroico en 1799 y se convirtió se convirtió en el “primer cónsul” del país para luego tomar la corona.

2. Napoleón era un líder carismático

El emperador era un líder carismático y un hábil comunicador. Sabía cómo inspirar a sus tropas y ganarse el apoyo popular. Su habilidad para expresar sus ideas de manera clara y persuasiva contribuyó a mantener el respaldo de la opinión pública.

El periodista, William Anthony Hay, a través de uno de sus artículos explica que este personaje histórico fue tan importante que llenó un vacío que implicaba más que un vacío de poder resultante de ciclos de malestar revolucionario. Y su carisma, lo logró hacerlo.

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3. Apostó por innovar y reformar Francia

A nivel interno, Napoleón implementó numerosas reformas que modernizaron la administración, la educación y la justicia en Francia. Su capacidad para llevar a cabo cambios significativos y eficientes demostró su habilidad para gobernar y transformar sistemas.

No solo fue en las leyes, Napoleón, también le dio al mundo distintos avances empresariales que hasta el día de hoy son tomados en cuenta. De hecho, en la Escuela de Negocios de Columbia, los estudiantes se pueden matricular al curso “La mirada de Napoleón“.

En este taller, el profesor William Duggan utiliza 10 herramientas de instrucción para abrir la mente a la ideación creativa. Esto ayuda potencialmente a los estudiantes en su vida personal y profesional, según el sitio del instituto.

“Muestro muchos ejemplos para que la gente pueda ver cómo funciona esto desde todos los diferentes ángulos”, comenta.

4. Tomaba decisiones rápidamente

Napoleón era conocido por tomar decisiones rápidas y decisivas. Aunque esto a veces llevaba a errores, también le permitía mantener la iniciativa y adaptarse rápidamente a las cambiantes circunstancias.

Esto le costó grandes triunfos y caídas a lo largo de su carrera. Por ejemplo, en una campaña ultrarrápida, Napoleón destruyó una alianza que se había opuesto a los franceses desde 1792.

Sin embargo, en 1812, cuando intentó enfrentarse a los rusos, fue derrotado cuando él y su ejército cruzaron el río Neman el 24 de junio de 1812 para intimidar a Rusia, pero resultó ser la ruina de su imperio.