¿Los legos podrían hacer las prótesis más accesibles? La respuesta podría ser un sí. Descubre el viaje de David Aguilar, un inventor que tiene el talento para revolucionar el mundo de la medicina con ayuda de las famosas piezas de juguete.
Como a la mayoría de los niños pequeños, a David Aguilar le encantaba jugar con legos. Construía aparatos y juguetes más grandes y mejores. Sin embargo, su situación era diferente, nació con el síndrome de Poland, un trastorno que provocó que su antebrazo derecho no se desarrollara.
Como resultado de su afición por los bloques de juguete y su situación, el inventor construyó un brazo protésico completamente funcional con piezas de Lego a sus 18 años.
Este sería el primero de muchos proyectos nuevos que lideraría en su búsqueda de mejorar el acceso a prótesis asequibles para personas de todo el mundo.
David Aguilar estudió bioingeniería en la Universidad Internacional de Cataluña. Actualmente tiene múltiples premios en su anaquel, incluido un récord mundial Guinness en 2019.
Su principal misión es crear un mundo más amable e inclusivo. Su historia esta llena de resiliencia, creatividad y determinación inquebrantable para transformar los desafíos en oportunidades.
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Obtener una prótesis de brazo o pierna en México puede ser un desafío considerable, una situación que afecta a miles de personas que han perdido alguna extremidad debido a accidentes, enfermedades o condiciones congénitas.
Aunque estos elementos pueden transformar vidas son varios los obstáculos que impiden tener acceso a estos dispositivos. Entre los factores más significativos se encuentran el alto costo, la falta de cobertura por parte del sistema de salud pública, la escasez de especialistas y la insuficiente infraestructura en el sector salud.
El precio de una prótesis puede se de hasta 500 mil pesos, dependiendo del tipo y la tecnología utilizada. Las prótesis más avanzadas, que ofrecen un mayor rango de movimientos y mejor funcionalidad, pueden ser extremadamente costosas.
Este alto costo pone a las estos elementos fuera del alcance de muchas personas, especialmente aquellas de bajos recursos. Además, los costos adicionales de mantenimiento, reparaciones y reemplazos periódicos pueden sumar una carga financiera significativa.
Además, el sistema de salud pública en México, enfrenta numerosas limitaciones. Aunque estos institutos ofrecen algunas opciones de prótesis, la disponibilidad es limitada y los tiempos de espera pueden ser largos. Muchas veces, las prótesis disponibles a través de estos servicios son básicas y no cubren las necesidades específicas de cada paciente.
En una entrevista, David Aguilar mencionó que las prótesis necesitan mucho trabajo en términos de adaptabilidad y comodidad. Si bien muchos diseños cuentan con diferentes funciones, no todos necesitan un brazo protésico anatómicamente correcto. Diseñar una pieza debería ser una labor personalizada.
“La experiencia de diseñar y construir prótesis con legos para mi condición física me hizo darme cuenta de lo difícil que es replicar el cuerpo humano. Especialmente con un juguete”, comentó.