Cuando un emprendedor intenta mantener su negocio a flote suele cometer algunos errores comunes que lo pueden llevar al fracaso. Cerrarse a otras ideas disruptivas o promover procesos burocráticos poco eficaces son algunos ejemplos.
Todos los días surgen nuevas ideas de negocios y con ellas personas dispuestas a dejar sus empleos formales con el fin de apostar su tiempo y dinero para crear una empresa que le resulte apasionante. Sin embargo, no todo es tan fácil.
Los principales factores que llevan al fracaso a un negocio son la falta de reconocimiento del mercado (34 por ciento), la mala administración del negocio (32 por ciento) y problemas con los socios (25 por ciento), de acuerdo con la Radiografía del Emprendimiento 2021.
¿Por qué fracasan los nuevos negocios? Estas son algunas de las causas más comunes
Las empresas atraviesan por momentos buenos y malos a lo largo de su historia y en cada una de esas etapas sus fundadores pueden cometer equivocaciones que pueden comprometer la existencia de su proyecto.
Muchos emprendedores que lanzan al mercado su proyecto temen mostrarlo al mundo, eso es normal. Pero es un grave error ya que eliminan oportunidades de colaboración que podrían resultar beneficiosos a corto, mediano o largo plazo.
Enriquecer su vida con personas que tengan una visión diferente sobre cómo hacer las cosas hace que las posibilidades de que crezca un negocio (ya que será respaldado por más personas) sean mayores, de acuerdo con Allison Campbell, CEO de Zubale.
“Tener voces con la misma perspectiva de la vida siempre es una ganancia, así puedes conocer grandes aliados”, comentó.
Acallar las voces de las personas que te rodean y que tienen puntos de vista igual de diferentes a los que tiene un emprendedor siempre significará una pérdida. Aún más cuando se tratan de socios o colaboradores.
Es necesario entender que un nuevo negocio siempre surge gracias a la necesidad de atender los problemas de distintas formas y nunca sobrarán voces que ayuden a los líderes a pensar fuera de la caja.
“Cuando estás construyendo un negocio e intentas que se mantenga es muy valioso controlar con voces igual de disruptivas que las tuyas para que te apoyen a generar nuevas ideas y te apoyen”, agregó Campbell.
La cultura de la rapidez es lo que mueve al mundo y contar con procedimientos eficaces en el menor tiempo posible en una compañía es pieza clave para su desarrollo.
Muchas veces los emprendedores hacen lo contrario por miedo al cambio y por adoptar viejos sistemas con los que fueron educados, según Guillermo Villegas, cofundador de Zebrands.
“Los nuevos emprendedores tienen el deber de ser antiburocráticos. Por ejemplo, en Zebrands tenemos un proceso de revisión anual para saber qué colaboradores deben de irse y cuáles quedarse”, dijo.
Cómo disfrutar el fracaso, aprender de él y luego abandonarlo
En medio de los procesos y crecimiento de cualquier negocio muchos de sus líderes se enfocan en adoptar nuevos procesos o incluso modelos tecnológicos que ayudarán a hacer de sus procesos más eficientes y, a pesar de que realizar esas acciones es necesario, enfocarse solamente en ellas es un grave error.
“En toda la vida de tu negocio debes de mantenerte obsesionado por tu cliente. Lo debes de analizar y escuchar para seguir brindándole un buen producto”, agregó Villegas.
Por más que un emprendedor ame la idea del proyecto que fundó y le apasione luchar por ella, siempre habrá días malos, explicó Bárbara González Briseño, CEO de Bitso México.
El proceso de creación y mantenimiento de un negocio no siempre será positivo o negativo, más bien existen días buenos y malos. O también existen negocios que pueden resultar más provechosos que otros.
“La primera idea que tengas sobre lo que quieres hacer siempre será mala y quizá el camino te lleve a hacer cosas que nunca pensaste hacer o que cambie un poco o mucho lo que haces de tu idea inicial. Pero debes de aprender a luchar con eso”, mencionó.