La importancia del edge en las cargas de trabajo modernas: ¿Por qué las empresas deben centrarse en ello?
Las cargas de trabajo modernas, como el análisis de datos en tiempo real y la Inteligencia Artificial, generan enormes cantidades de datos que deben ser procesados y analizados rápidamente.
En la era digital actual, las empresas se enfrentan a una creciente demanda de procesamiento de datos en tiempo real y baja latencia.
Las cargas de trabajo modernas, como el análisis de datos en tiempo real, la Inteligencia Artificial y el Internet de las cosas (IoT), requieren una infraestructura ágil y eficiente que pueda manejar grandes volúmenes de datos de manera rápida y confiable. Es aquí donde el concepto de edge computing se vuelve crucial.
El edge computing se refiere a la distribución de recursos informáticos y de almacenamiento más cerca del origen de los datos y de los usuarios finales, es esa frontera donde converge el mundo físico con el digital.
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En lugar de enviar todos los datos a un centro de datos centralizado, el procesamiento se realiza en dispositivos o servidores locales, conocidos como edge devices on edge servers.
Esto permite una capacidad de respuesta más rápida y una menor latencia, lo que resulta esencial para aplicaciones que requieren un tiempo de respuesta casi instantáneo.
De acuerdo a la consultoría IDC (International Data Corporation), se estima que el gasto de hardware, software y servicios que llevarán a cabo las empresas y proveedores para implementar soluciones de Edge Computing en América Latina, es de más de 5 mil millones de dólares, con una tasa de crecimiento promedio del 16 por ciento hacia el 2026.
Beneficios de Edge para las empresas
1. Mayor ancho de banda y baja latencia
Las cargas de trabajo modernas, como el análisis de datos en tiempo real y la Inteligencia Artificial, generan enormes cantidades de datos que deben ser procesados y analizados rápidamente.
Al llevar el procesamiento de datos al Edge, las empresas pueden aprovechar conexiones de red de alta velocidad y baja latencia para lograr un rendimiento óptimo.
Esto es especialmente crucial en aplicaciones críticas, como la seguridad en tiempo real o la detección de fraudes, donde cada milisegundo cuenta.
2. Reducción de la carga en la red central
Al procesar datos en el Edge, las empresas pueden reducir la cantidad de datos que se envían a través de la red centralizada.
Esto no solo alivia la congestión de la red, sino que también reduce los costos asociados con el ancho de banda y el almacenamiento en la nube. Además, al minimizar la transferencia de datos, se mejora la seguridad y la privacidad, ya que los datos sensibles pueden mantenerse localmente en lugar de ser transmitidos a través de redes potencialmente inseguras.
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3. Mayor autonomía y resistencia
El edge computing permite a las empresas tomar decisiones de manera autónoma en tiempo real, sin depender de una conexión constante a la nube o al centro de datos centralizado.
Esto es especialmente valioso en entornos donde la conectividad puede ser intermitente o poco confiable, como en aplicaciones IoT en áreas remotas o en entornos industriales hostiles.
Al tener capacidad de procesamiento y almacenamiento local, las empresas pueden garantizar la continuidad de sus operaciones incluso en situaciones de desconexión.
4. Personalización y experiencia del cliente mejoradas
Al acercar el procesamiento de datos al edge, las empresas pueden ofrecer experiencias de cliente más personalizadas y en tiempo real.
Por ejemplo, en el sector minorista, pueden utilizar la tecnología de edge computing para analizar los datos de comportamiento de los clientes en la tienda y ofrecer recomendaciones personalizadas en el momento adecuado. Esto mejora la satisfacción del cliente y la fidelidad a la marca.
Al destacarse como una solución corporativa en ascenso, la importancia del edge computing en las cargas de trabajo modernas es innegable.
Su enfoque centrado en los puntos más alejados de los centros de datos, con servidores y soluciones diseñados específicamente para entornos periféricos, garantiza un rendimiento óptimo, baja latencia y una experiencia del cliente mejorada.
Al adoptar la tecnología edge computing, las empresas pueden desbloquear todo el potencial de las cargas de trabajo modernas y obtener una ventaja competitiva en la era digital.
SOBRE EL AUTOR INVITADO
Raymundo Peixoto es Vicepresidente Senior y Director General de Soluciones de Datacenter en Dell Technologies LatAm.