Acceso a internet de fibra óptica, ¿cómo va México y qué retos existen?

En mis columnas anteriores he hablado del valor de la fibra óptica en el despliegue de la red 5G, en el fenómeno del nearshoring que está llegando al país y en la conectividad de los centros de datos e hiperescaladores. En esta entrada quiero compartir sobre el papel que juega la fibra en el acceso a internet en la población.

Hoy en día, la fibra óptica es la infraestructura clave para las telecomunicaciones globales, ya que presenta, frente a otras opciones como el cobre o la fibra de vidrio, mejor transmisión de datos, mayor velocidad, menor latencia e incluso más seguridad. Se prevé que el despliegue de infraestructura de fibra sea fundamental para lograr el desarrollo digital en la sociedad, las empresas y la industria.

Fibra óptica, el verdadero habilitador de 5G

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico destaca que la fibra es la principal tecnología para servicios de banda ancha fija en al menos 19 de los 38 países de la organización, siendo Corea del Sur y Japón los de mayor penetración, ya que la fibra representa más del 80 por ciento de las conexiones a internet en estos países.

Hablando del acceso a internet por fibra en México, el estudio Conectividad de Banda Ancha Fija y Costeo de Redes de Fibra Óptica a Nivel Municipal en México, realizado por el Instituto Federal de Telecomunicaciones, destaca que en el país alrededor de 9.21 millones de casas están conectadas a servicios de internet a través de fibra óptica, lo que representa casi el 30 por ciento de hogares en el territorio nacional. 

Esta cifra es bastante alentadora, pues tan sólo hace diez años eran 546 mil 873 las conexiones a internet desde fibra óptica en los hogares mexicanos.

En el caso del tendido de fibra, se estima que existen aproximadamente 500 mil kilómetros de fibra óptica instalada en el país, una cifra insuficiente para conectar a toda la población mexicana a internet digno.

En este estudio del IFT, se proyecta que el costo para completar la infraestructura de fibra óptica en México es de 216 mil 337 millones de pesos, siendo la región sureste (Chiapas, Guerrero y Oaxaca) la que mayor inversión necesitaría.

Además del tema de costos e inversiones, la construcción y modernización de redes de fibra óptica en nuestro país enfrentan grandes retos, como las barreras regulatorias que existen en los niveles municipales y estatales, la falta de seguridad, el abaratar los costos de despliegue y la necesidad de trabajo conjunto entre gobierno e iniciativa privada, por mencionar algunos.

Desde mi perspectiva, en los siguientes años se debe trabajar en el diseño de políticas e incentivos que faciliten a las empresas el tendido de estas redes.

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A pesar de los desafíos, se espera que el mercado de fibra óptica tenga un gran dinamismo. ReportLinker proyecta que el mercado mundial de fibra alcanzará los 24 mil millones de dólares para 2027.

Por su parte, Fiber Broadband Association prevé que en los próximos cinco años las inversiones para el despliegue de fibra en Latinoamérica estén impulsadas tanto por los operadores de redes hibridas y de cobre, que buscan migrar a fibra, como por las empresas de redes neutrales, que se están volviendo pilares en este despliegue intenso de fibra y están habilitando infraestructura para cualquier operador en la región.

Estamos en un gran momento para las telecomunicaciones, en el que la fibra óptica será el cimiento para que en el futuro la conectividad sea más accesible, eficiente y de calidad para todas las personas, y por qué no, incluso más sostenible. Es necesario el trabajo de todos los actores del sector para lograrlo.

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