X-Men’97, ¿cómo trabajar en equipo y sacar lo mejor de cada colaborador?
Marvel decidió retomar la animación e historias que volvieron a X-Men un fenómeno cultural de los años 90. (@soberbananas)
Sin importar las crisis o los problemas, los X-Men saben que pueden contar el uno con el otro. Esta es apenas la primera lección de otras 5 que le enseñan a los colaboradores a trabajar en equipo.
En el día a día los líderes tienen el deber de brindar apoyo a cada uno de sus colaboradores. Esto lo logran impulsando sus talentos y guiándolos. Al menos, así lo demostró el Profesor X, un personaje que reunió a seres únicos y formó un equipo indestructible: los X-Men.
La misión del personaje dotado de poderes psíquicos no fue fácil. Wolverine, Tormenta, Jean Grey, Cíclope y otros miembros de la liga de superhéroes tenían problemas personales que los hacían reacios a trabajar en equipo. Sin embargo, sus talentos sobrepasaron este tipo de retos.
Este fue el inicio de la historia de X-Men, una tira cómica que nació en 1963 y cuenta la historia de algunos seres humanos con un rasgo genético que les brinda habilidades únicas. No obstante, la generación millennial impulsó la popularidad de su historia y se convirtió en la principal audiencia de la serie animada que nació en 1992.
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Lecciones para trabajar en equipo de los X-Men
Los X-Men le enseñaron a los jóvenes y niños a abrazar su unicidad. Empoderaron a aquellas personas que se sentían solos por contar con talentos especiales, estas son algunas de las razones por las que cada personaje se ganó el corazón de su público.
Esto hizo que las grandes empresas de la industria del entretenimiento apostaran por su historia. Así surgieron algunos proyectos cinematográficos que detallaron la historia del grupo de superhéroes.
En una de sus últimas películas, X-Men: The Last Stand, lanzada en 2006, el estudio de cine que llevó a la realidad este proyecto, Twenieth Century Fox, ganó más de 102 millones de dólares en el día de su estreno.
Al parecer, al público aún le resultaba atractivo conocer la dinámica entre los integrantes de los X-Men. Esto lo capitalizó Marvel y no tuvo miedo en apostar por lanzar la historia del clásico animado de los años noventa y explorar sus conflictos desde un ángulo distinto.
1. Son un equipo diverso y adaptable
Los X-Men son un grupo diverso de mutantes con habilidades únicas. Aprenden a aceptar y valorar las diferencias entre ellos, reconociendo que cada miembro aporta algo único al equipo.
Los colaboradores pueden aplicar esta lección reconociendo y valorando las diferencias entre ellos y sus colegas. La diversidad de habilidades, antecedentes y perspectivas puede enriquecer el equipo y llevar a soluciones más creativas y efectivas.
2. Confían el uno en el otro
Los miembros de este equipo confían unos en otros en situaciones difíciles. Saben que pueden depender el uno del otro en momentos de peligro y confían en que cada uno cumplirá con su parte para alcanzar los objetivos.
Los trabajadores pueden construir este ambiente de confianza trabajando en equipo de manera consistente y cumpliendo con sus responsabilidades. Al confiar en sus colegas, pueden trabajar de manera más efectiva.
3. Un día tienen un líder, mañana pueden tener otro
Los X-Men a menudo operan bajo diferentes líderes, como el Profesor X, Cíclope, Tormenta o Wolverine en ciertos momentos. Esto muestra la importancia de un liderazgo adaptable que pueda surgir según las necesidades del equipo y las circunstancias.
Si bien, muchos colaboradores se sienten cómodos siguiendo las instrucciones de una persona y aceptando su jerarquía. Pero muchas veces este esquema de trabajo puede no funcionar. Por esto es necesario un ambiente de flexibilidad en la empresa.
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4. Respeto por las habilidades del otro
Cada miembro de los X-Men tiene habilidades únicas y valiosas. Entre ellos, no solo lo reconocen, también respetan sus fortalezas individuales esto permite que cada uno contribuya al equipo de la mejor manera posible.
En el mundo empresarial, este tipo de actitudes ayudan, no solo a generar un ambiente de trabajo óptimo, ya que también permite delegar actividades.
5. Los X-Men trabajan en equipo incluso ante las crisis
Este equipo, por su naturaleza, a menudo enfrenta amenazas graves que requieren un esfuerzo de equipo para superarlas. Aprenden a trabajar juntos de manera efectiva incluso en situaciones de alta presión y crisis.
Los X-Men están ahí el uno para el otro en momentos de necesidad. Los colaboradores pueden aplicar esta lección brindando apoyo emocional y práctico a sus colegas durante períodos de estrés o desafíos.
6. Se comunican efectivamente
La comunicación es esencial para el éxito del equipo. Los X-Men constantemente comparten información sobre amenazas, estrategias y desarrollos, lo que les permite coordinar sus acciones de manera efectiva.
Al poner en práctica esta estrategia, los equipos pueden asegurarse de comunicar sus ideas de manera clara y abierta con sus compañeros. Esto también implica escuchar activamente y proporcionar retroalimentación constructiva.
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