La nueva oficina de la empresa está en Guadalajara y requirió de una inversión de 5 millones de peso. Su diseño amigable rompe con el esquema tradicional de los espacios de trabajo.
Guadalajara, Jal. Cuando Bismarck Lepe salió de la universidad se incorporó a las filas de Google, ahí conoció otra forma de trabajo y un ambiente amigable que rompía con el esquema tradicional de las oficinas.
Con esa experiencia, decidió que cuando pusiera su empresa lo haría al estilo Google, con espacios abiertos, inclusivos y que fuera un lugar donde el colaborador se sintiera como en casa.
En el 2014, Bismarck fundó Wizeline, compañía tecnológica que trabaja con los corporativos ofreciendo una plataforma para que desarrollen software de forma rápida.
“Mi primer trabajo saliendo de la universidad de Stanford fue trabajar en Google. Vi crecer a Google de 200 empleados a casi 15,000 en cuatro años y medio. Una de las cosas que aprendí es que si tienes un lugar donde la gente se siente cómoda, donde se pueda enfocar en los retos que tiene, pero le tratas de quitar todos los demás problemas, son más productivos, porque quieren estar aquí”, mencionó en entrevista Bismarck Lepe, CEO y fundador de Wizeline.
La empresa se fundó en San Francisco, California, pero desde el inicio se pensó en México, en Guadalajara, donde instaló una oficina de 10 metros cuadrados, pero el crecimiento de la empresa lo orilló a cambiar a un espacio de 200 metros cuadrados y ahora abre sus nuevas oficinas en un área de 10,000 metros cuadrados divididos en tres pisos de un edificio del Distrito la Perla, con una inversión de 5 millones de dólares.
“En el 2010, vimos que se estaba complicando contratar y retener gente en Silicon Valley y decidimos que teníamos que encontrar un lugar afuera para desarrollar nuestro producto, buscamos lugares en Asia, Europa y Sudamérica, y decidimos que México era muy interesante por la calidad y candad de talento y la cercanía con Estados Unidos, empezamos a invertir en Guadalajara porque era conocido como el Silicon Valley de México y fue todo un éxito”, dijo Bismarck, de padres mexicanos.
El espacio está diseñado al estilo Google, Facebook o Amazon, cuenta con 63 salas de reuniones, infraestructura de conectividad, wellness room para meditar y rezar, terraza, bar, una área de videojuegos, gimnasio y tobogán para deslizarse del quinto al cuarto piso.
También cuenta con un comedor gratuito para los empleados, donde pueden desayunar, comer o cenar y guardería con capacidad para 245 niños y donde actualmente están inscritos 12 menores.
Javier Gagliardo, Chief Business Officer de Wizeline, mencionó que se tiene un “ambiente relajado, disruptivo y de colaboración. Somos muy creyentes de dar empowerment a la gente y promover el trabajo en equipo. Creemos que las mejores ideas y calidad de trabajo son el resultado de conformar equipos multidisciplinarios, que tienen el empowerment y la autonomía para tomar decisiones y madurar”.
Asimismo, Ricardo Tapia, Executive Briefing Center dijo: “Tenemos más de 18 nacionalidades representadas, lo cual involucra diversidad de religiones. Esta área (wellness room), que está cubierta con las cortinas, es una sala para orar”.
Precisó que en Wizeline también existe un consejo de inclusión que se especializa en encontrar las mejores herramientas para crear un balance entre vida y trabajo, romper la brecha de género y crear inclusión para la mujer de la comunidad LGBT.
Actualmente, Wizeline tiene 600 empleados a nivel internacional, de los cuales 400 se ubican en la nueva sede, que tiene capacidad para alojar hasta 2,000 colaboradores.
“Las empresas de tecnología no tenemos maquinaría, no somos los edificios que dan el valor, es el talento que puedes atraer a tu empresa, eso es lo más importante. El buen talento tiene oportunidades de moverse por todo el mundo. Queremos crear una cultura, donde podemos atraer al mejor talento, donde van a poder ejercer y aprender, donde ellos mismos van a sentirse dueños de su propia empresa, esa es la cultura”, mencionó Bismarck.
Wizeline también apuesta por el talento, con Wizeline Academy apoya el emprendimiento internacional a partir de ofrecer cursos gratuitos y espacios para desarrollar la innovación. A la fecha se han dado más de 100 cursos en cuatro países y recibido 5,500 aplicaciones, de las cuales 2,500 se han graduado. Además, dos estudiantes han empezado su empresa de consultoría.
Javier mencionó que 85% de las personas que estudian en Wizeline Academy han reportado una mejora en su carrera profesional y 25% ha conseguido un nuevo trabajo.
El programa, dijo, no tiene como propósito un beneficio directo. “Creemos que Wizeline es más exitosa si la comunidad le va bien. Inclusive entrenamos a clientes que compiten con nosotros y no nos preocupa, es un programa abierto”.
También apoya startups internacionales para que desembarquen en Guadalajara, por medio del programa StartupGDL, que les ayuda a crear su identidad, entender el mercado, construir sus equipos de talento y ofrece espacios en las de Wizeline, a la fecha son 12 startups las que se alojan en la empresa.
“Somos una compañía que promueve el que las mejores empresas de tecnología vengan a radicar a Guadalajara, con la idea de que se convierta en el Silicon Valley de México”.
elizabeth.meza@eleconomista.mx