El 54.3 por ciento de los colaboradores en México trabaja desde la informalidad y este es un problema que se puede arreglar desde el capitalismo consciente. Descubre qué significa este término y cómo aplicarlo.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 54.3 por ciento de los mexicanos trabaja desde la informalidad. Este problema tiene raíces sistemáticas, sin embargo, el capitalismo consciente puede ayudar a erradicarlo.
Rocío Díaz (Roru), CEO y Fundadora de ABUNDANTE por Planeación Mística, explicó que la informalidad laboral es un problema global. No se origina en la precariedad sino en la concepción de que el colaborador no tiene valor, que es sólo un recurso y que se puede malbaratar.
“Para el capitalismo consciente esto es insostenible. El colaborador, en realidad, forma parte de un círculo virtuoso donde la abundancia se multiplica”, añadió.
El capitalismo consciente tiene el potencial para reducir la informalidad debido al círculo virtuoso que genera en las empresas. En estos lugares, las decisiones de negocios toman en cuenta la necesidad de todos. No hay lugar para el abuso.
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Ser un capitalista consciente significa participar en prácticas empresariales que van más allá del enfoque tradicional centrado en el beneficio para el accionista. En su lugar, priorizan el bienestar de todas las partes interesadas, incluidos los colaboradores.
Según Eddie Burns, creador de contenido, los capitalistas conscientes creen que las empresas tienen un propósito mayor que el mero hecho de ganar dinero. Por esto, buscan crear un impacto positivo en la sociedad.
Los principios y valores clave del capitalismo consciente incluyen:
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Adoptar el capitalismo consciente en la oficina no es solo una estrategia para mejorar el desempeño financiero, sino también una forma de crear un entorno de trabajo más humano, ético y sostenible.
Al centrarse en el propósito, el bienestar de los empleados, la transparencia, el desarrollo personal y la responsabilidad social, las empresas pueden transformar su cultura organizacional.
El capitalismo consciente no solo es una opción viable, sino que es una necesidad en un mundo donde los valores y la ética son cada vez más importantes. Estas son algunos consejos para que los líderes comiencen a adoptar esta forma de pensamiento: