La NFL confirmó que el intérprete puertorriqueño encabezará el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl LX. Te explicamos por qué su presentación no solo marcará un hito en la música, también en el ámbito político de Estados Unidos.
Con un video publicado junto a Apple Music, Bad Bunny anunció que será el artista principal del medio tiempo del Super Bowl LX. En las imágenes se le ve sentado en un goalpost frente al mar, con “Callaita” como música de fondo, en un mensaje que rápidamente se viralizó.
El intérprete de “DeBÍ TiRAR MáS FOToS” se convertirá en el primer artista latino en presentarse en solitario en el espectáculo de medio tiempo, un escenario que ha sido reservado históricamente para superestrellas globales. Esta será su segunda aparición en el Super Bowl, luego de acompañar a Shakira y Jennifer Lopez en 2020.
MIT SMR México se financia mediante anuncios y sociosDesde la perspectiva de expertos, el anuncio representa un movimiento significativo en el contexto cultural y político de Estados Unidos, especialmente por la relevancia que el artista tiene entre comunidades latinas y jóvenes.
3 lecciones de marketing que puedes aprender de Bad Bunny
Bad Bunny no solo subirá al escenario más visto del mundo, también marcará un momento clave para la representación latina y la música en español.
Estas seis claves te ayudarán a entender por qué su presentación en el Super Bowl LX va mucho más allá del espectáculo.
El anuncio se realizó a través de una publicación conjunta en Instagram durante el medio tiempo de Sunday Night Football el 28 de septiembre de 2025.
Durante el juego entre Cowboys y Packers, la NFL confirmó que Benito Martínez encabezará el próximo Super Bowl. Minutos después, Apple Music amplificó el mensaje en sus redes sociales, convirtiéndolo en tendencia global.
El espectáculo de medio tiempo de Bad Bunny está programado para el domingo 8 de febrero de 2026, durante el Super Bowl LX.
Este será uno de los eventos televisivos más vistos en el mundo, con audiencias que superan los 100 millones de espectadores.
El show es organizado por la NFL en colaboración con Apple Music, patrocinador oficial del medio tiempo.
Además, la curaduría artística corre a cargo de Jay-Z, quien lidera la selección y negociación con los artistas a través de Roc Nation.
Su participación ha sido clave para que el espectáculo gane diversidad y relevancia cultural en los últimos años.
Durante su participación en Saturday Night Live posterior al anuncio oficial, Bad Bunny bromeó al final de su monólogo en inglés y una parte en español:
“Y si no entendieron lo que dije, tienen cuatro meses para aprender (español)”.
Esta frase anticipa lo que muchos fans esperan: un show en el que su idioma natal tenga un papel protagónico.
Todo apunta a que interpretará algunos de sus éxitos más populares, consolidando un medio tiempo mayoritariamente en español por primera vez en la historia del Super Bowl.
Su presencia representa a Puerto Rico y a toda una generación de artistas latinos que han logrado romper las barreras lingüísticas en la música global.
Esta elección de la NFL tiene un peso simbólico y político. Declaraciones de figuras públicas, incluido el propio presidente de Estados Unidos, generaron polémica.
Medios conservadores y sectores afines al movimiento MAGA han cuestionado la decisión de la NFL, mientras que millones de seguidores celebran el reconocimiento al talento latino.
Bad Bunny ha sido una voz crítica en temas sociales y migratorios, lo que convierte su presentación en un momento con alto impacto cultural. Para algunos, es una celebración de diversidad; para otros, un acto con connotaciones políticas.
Aunque la NFL ya confirmó formalmente a Bad Bunny como artista central del medio tiempo, la decisión generó un intenso debate público.
Donald Trump calificó la selección como “absolutely ridiculous” y admitió no conocer al artista.
Al mismo tiempo, asesores de inmigración afirmaron que agentes de ICE podrían desplieguearse en el evento, lo que incrementó las tensiones alrededor de la participación del cantante puertorriqueño.
La NFL, por su parte, respaldó la designación en una conferencia de prensa y la describió como “cuidadosamente pensada” para una audiencia global.
Dejando entrever que este episodio resalta cómo un espectáculo que normalmente se entiende como entretenimiento se convierte también en símbolo cultural: la elección de un artista que canta principalmente en español y que expresa posturas políticas visibles plantea preguntas sobre identidad, representación y poder en Estados Unidos.
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