Los ciudadanos de El Salvador volvieron a elegir como presidente a Nayib Bukele, el hijo de uno de los empresarios y líderes musulmanes más conocidos en el país, Armando Bukele.
De acuerdo con información de la Agence France-Presse (AFP), el 85 por ciento de los salvadoreños votaron a favor del candidato que forma parte del partido Nuevas Ideas el pasado 4 de febrero. Esto significa que el mandatario permanecerá en el poder hasta 2029.
Una de las principales causas por las que su gobierno es considerado como uno de los más populares en América Latina, de acuerdo con Foreign Policy, es por sus ideas disruptivas y novedosas. Y no podría ser de otra forma, en 2019 y con solo 37 años se volvió el presidente más joven de la región.
“Su juventud ayudó a promocionar su presidencia como una oportunidad para un nuevo comienzo”.
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Nayib Bukele se nombró a sí mismo como “el CEO de El Salvador” y apostó por una nueva forma de hacer política en la región.
Para muestra, basta un botón. En noviembre de 2021 el país centroamericano apostó por darle la bienvenida al Bitcoin como moneda de curso legal. Esto sucedió en medio de la guerra que el gobierno de Estados Unidos declaró a las criptomonedas.
Incluso, en junio de 2023 los senadores estadounidenses, Jim Risch y Bob Menéndez, reintrodujeron un proyecto de ley bipartidista solicitando un informe del Departamento de Estado sobre la adopción de Bitcoin por parte de El Salvador.
Esto debido en gran parte a que los miembros de la cámara alta tienen sospechas de que su adopción representa una amenaza directa a su nación ya que generará impactos en las relaciones económicas bilaterales.
“El uso de criptomonedas como moneda de curso legal podría debilitar la estabilidad económica y financiera y empoderar a actores malignos”, comentó Risch.
Sin embargo, el recibimiento de Bitcoin por parte de Nayib Bukele no ha sido la única decisión que la comunidad internacional ha puesto en duda.
Durante su primer gobierno el presidente instituyó una política de cero tolerancia al crimen. Esto hizo que los homicidios en el país disminuyeran un 92 por ciento desde 2015, según Wall Street Journal. Por otro lado, Amnistía Internacional acusó al gobernante de abolir los derechos humanos de gran parte de su población.
“En el marco del régimen de excepción actual, las autoridades salvadoreñas han cometido violaciones masivas de derechos humanos, entre ellas miles de detenciones arbitrarias y violaciones al debido proceso, así como tortura y malos tratos”, según la organización.
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Algunos salvadoreños se encuentran a favor de las medidas tomadas por Nayib Bukele en su gobierno anterior y otros más en contra. Pero más allá de su popularidad interna, el mandato de este gobernante conmocionó al mundo.
Estas son algunas de las razones por las que el empresario dejó al mundo con la boca abierta en más de una ocasión.