Estos personajes esconden estilos de liderazgo que marcan la diferencia. Mientras uno apuesta por la estrategia, el otro por la intuición. Descubre cuál impulsa más tu creatividad, resiliencia y toma de decisiones en situaciones complicadas.
Perderse también es una forma de encontrarse. En la oscuridad del fondo del mar, Nemo y Dory se conocieron y fueron guiados por dos estilos de liderazgo tan distintos como complementarios, él desde la estrategia y ella desde la intuición.
Sin embargo, la incertidumbre los convirtió en algo más que compañeros de viaje, los volvió familia, dispuestos a cruzar océanos, cometer locuras razonables y rescatarse siempre que hiciera falta.
MIT SMR México se financia mediante anuncios y sociosLas películas Buscando a Nemo y Buscando a Dory le regalaron al mundo historias emotivas, pero viéndolas desde la perspectiva del liderazgo se muestran dos perfiles claros: Nemo, disciplinado y estratégico, y Dory, impulsiva pero creativa.
Y aunque parezca curioso, estos personajes replican modelos organizacionales reales, de acuerdo con el reconocido psicólogo Daniel Goleman. Pero no todos los equipos están encabezados por un gran líder.
Por eso el 70 por ciento de la variabilidad en el rendimiento de un equipo depende directamente del estilo de liderazgo, de acuerdo con un informe de Gallup.
No sorprende, entonces, que comparaciones como la de Nemo y Dory hayan ganado terreno en el análisis organizacional, ya que permiten leer con sencillez fenómenos complejos y conectar historias conocidas con retos actuales.
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El liderazgo de Nemo nace de la experiencia y del aprendizaje por una crisis personal y conflictos con su padre Marlin.
Su evolución en la película refleja un modelo muy similar al liderazgo situacional, donde se adapta y crece con cada desafío.
En palabras más simples, este personaje es el líder que mantiene el rumbo, incluso cuando el entorno es incierto.
Dory encarna un liderazgo menos convencional, pero tremendamente valioso. Su capacidad para adaptarse, improvisar y mantener el ánimo alto incluso en momentos críticos la convierte en un ejemplo de liderazgo creativo y emocional.
“Solo sigue nadando” es, en esencia, un mantra de gestión emocional y resiliencia. Un estudio de Catalyst muestra que los equipos con líderes altamente empáticos reportan un 76 por ciento mayor engagement.
Al observar a estos personajes desde la óptica de la gestión, emergen patrones útiles para interpretar cómo se dirige, se motiva y se construye cultura laboral en un escenario que cambia a diario.
También algo importante a tomar en cuenta es que no se trata de elegir entre un personaje y otro. La clave está en integrar ambos mundos.
Actualmente las empresas necesitan tanto análisis como intuición, combinar la estructura de Nemo con la flexibilidad de Dory es el movimiento más inteligente que se puede hacer.
Ventajas:
Desventajas:
Ventajas:
Desventajas:
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