Lo que el pádel me enseñó de las inversiones
El pádel y las inversiones tienen mucho en común. (Freepik)
Practicar pádel (de manera recreativa) tiene muchas lecciones que aplican también para el mundo de las inversiones. Aquí te cuento algunas.
En los últimos años, el pádel ha experimentado un notable auge en su popularidad, tanto en México como a nivel mundial.
Este deporte, que tiene sus orígenes en el jetset de las playas acapulqueñas a finales de los años 60, genera interés internacional por su dinámica de juego rápida combinando aspectos del tenis, raquet y otro clásico deporte mexicano, el frontón.
Del 21 al 26 de noviembre, la Ciudad de México es sede del World Pádel Tour en su edición 2023, el torneo internacional más importante de este deporte mexicano.
La competencia es significativa no sólo porque representa el regreso a casa de esta actividad que es ahora mundialmente conocida, sino también porque confirma a México como una parada obligatoria para cualquier competencia global de primer nivel.
Esto lo demuestran eventos de los organismos más importantes del mundo en disciplinas como la automotriz, el futbol americano y el béisbol, llevados a cabo en la capital del país recientemente.
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De acuerdo con datos proporcionados por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV)[1], en los últimos tres años se han incrementado por más de 1000 por ciento la cantidad de cuentas de inversión en casas de bolsa en México, de las cuales el 93 por ciento del total del mercado nacional es liderado por GBM.
Del lado del pádel, un informe de la consultora Deloitte estima que para 2026 alcanzará un valor global aproximado de 116 mil millones de pesos (6 mil millones de euros), además, el número de canchas de pádel se multiplicará para alcanzar las 85 mil en diversas partes del mundo.
A nivel personal, encuentro que practicar pádel (de manera recreativa) tiene muchas lecciones que aplican también para el mundo de las inversiones.
Por ejemplo, el pádel es un deporte que se juega en parejas. Conocer el estilo de juego de tu compañero o compañera, saber cuáles son sus preferencias y su tolerancia para tomar riesgos son aspectos clave para la victoria.
En las inversiones pasa algo muy similar; contar con un asesor que te conozca, que sepa cuál es tu perfil de inversionista y tus objetivos a corto, mediano y largo plazo incrementa exponencialmente las posibilidades de implementar una estrategia de inversión exitosa.
De igual manera, un encuentro de pádel, como en el tenis, se divide en varios sets, compuestos de varios puntos y, en caso de empate, se pasa a lo que conocemos como tie-breaks.
En el transcurso de un juego, es posible que te veas abajo o pierdas algún punto importante ante tus rivales; sin embargo, nunca estás fuera del encuentro.
En las inversiones, es posible que algún movimiento en el mercado o alguna acción en específico no te favorezca, pero eso no determina el resultado final.
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Los mejores inversionistas, al igual que los atletas más ganadores, siempre tienen claro cuál es el objetivo a largo plazo y no permiten que los altibajos les afecten de gran manera.
Por último, el aspecto de preparación mental es clave en ambos ámbitos. Cualquier acción que demanda nuestro tiempo, concentración y paciencia, requiere una preparación mental.
Mientras que en el pádel esto complementa y potencia la actividad física, en las inversiones la preparación mental significa mantenerse informado, estar en constante comunicación con tu asesor, tener bien claros y definidos los objetivos de inversión y cultivar la paciencia, pues de acuerdo con el plazo de inversión, los rendimientos pueden llegar antes o después.
Existen similitudes importantes entre lo que se necesita en la cancha de pádel y lo que se necesita para invertir con éxito.
SOBRE EL AUTOR INVITADO
Jose Molina es CMO de GBM
REFERENCIA
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