En la era digital, las empresas más grandes del mundo (como Disney) son objetivos atractivos para los cibercriminales. Estos ataques pueden tener consecuencias devastadoras, no solo para las empresas afectadas, sino también para sus clientes y socios y el ecosistema digital en general.
Una de las motivaciones más importantes detrás de estos ataques es que las grandes empresas suelen manejar enormes cantidades de dinero. Esto las convierte en blancos lucrativos para los cibercriminales.
Los ataques de ransomware, por ejemplo, pueden exigir pagos millonarios para liberar los sistemas secuestrados. Además, el robo de datos financieros o de tarjetas de crédito puede resultar en ganancias sustanciales para los atacantes. La posibilidad de obtener grandes recompensas financieras es una motivación poderosa.
Por otro lado, las corporaciones grandes poseen vastas bases de datos que contienen información valiosa. Esta incluye datos personales, financieros y de propiedad intelectual.
Los hackers malintencionados pueden vender esta información en mercados negros o utilizarla para realizar fraudes de identidad. Además, os gigantes corporativos suelen tener recursos significativos que pueden ser explotados para ataques posteriores, como servidores potentes y redes extensas.
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Los ciberataques no son algo nuevo. Desde el nacimiento de Internet, organizaciones grandes y pequeñas y de todos los sectores han sido blanco de amenazas cibernéticas de todo tipo y tamaño.
Pero a medida que la tecnología empresarial evoluciona, también lo hacen los piratas informáticos que intentan atacarla, lo que da lugar a ataques más complejos y más peligrosos que nunca.
Los delitos cibernéticos también están aumentando. Solo en 2023, se denunciaron más de 2 mil 300 millones de ataques cibernéticos en el Reino Unido , y cada ataque promedio costó a las empresas £3230 cada uno.
Ya sean malware, ransomware o phishing, estos ataques pueden variar desde interrupciones a pequeña escala hasta desastres a gran escala y pueden tener un impacto significativo en personas, empresas y gobiernos.